2007-09-11. De la Mesa de Trabajo de Marta Beatriz Roque, No. 69, 20070910
Jorge Alberto Liniaro Linares
Información:
Según testimonio del recluso Daniel Mena Torres, ocurrió lo siguiente:
"Cerca de las 11 y 30 a.m., en el pasillo que conduce a los comedores,
fui abordado por otro recluso, quién portando un cuchillo me lanzó
varias puñaladas. Por suerte, los presos de mi Destacamento lo abracaron
e impidieron me matara.
Recibí lesiones en ambos brazos. Yo responsabilizo al equipo de
funcionarios de guardia del primer suboficial Eusebio, que permite que
los presos anden con las llaves y abran los cepos de los comedores. No
quieren trabajar y mucho menos en los comedores, donde la peste del
rancho que nos dan de comer es insoportable.
En Kilo 7 no hay seguridad para la vida. Los destacamentos se juntan en
los pasillos y comedores. No hay control del orden interior. Hoy me tocó
a mí, pero puedo asegurar que esto es solo el comienzo de la matanza que
en cualquier momento es inevitable."
La falta de control aparejada a la apatía por el cumplimiento de sus
funciones y la ausencia de sensibilidad y conciencia por el cumplimiento
del deber de los militares en la Prisión de Kilo 7, puede provocar la
pérdida de vidas humanas en riñas de mayor envergadura y hasta un motín
o desorden en el establecimiento carcelario.
Reportó desde Kilo 7, Jorge Alberto Liniaro Linares.
http://www.miscelaneasdecuba.net/web/article.asp?artID=11551
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