2007-09-25.
Aini Martín Valero, Periodista Independiente, Cuba-Verdad
Desde hace muchos años el régimen castrista llama a los opositores
"mercenarios". Estos términos ya no se lo cree ningún cubano (aunque sea
revolucionario). El opositor pacifico no es pagado por ninguna potencia
extranjera; su lucha es netamente por amor. Amor a su pueblo, a su
tierra, a su futuro, a la necesidad cada vez más apremiante de ser libres.
Para conseguir la libertad de una nación siempre se necesita de ayuda.
El Grupo de Apoyo a la Democracia (GAD) ha demostrado ser uno de los más
fervientes colaboradores con el pueblo cubano. Su respaldo y ayuda ha
hecho estremecer a muchos cubanos necesitados de una simple aspirina o
tal vez de una silla de ruedas.
Hace unas semanas el Partido Republicano de Cuba ha tomado la iniciativa
de investigar esta noble acción que realiza el GAD. Cual sería nuestra
sorpresa al recorre casi toda la isla y encontrar abuelas con lágrimas
en los ojos y un nombre en sus labios, Frank Hernández Trujillo.
Las muestras de agradecimiento serían incontables. Los más beneficiados
sin duda alguna han sido los niños, los cuales han salvado hasta sus
vidas gracias a medicamentos enviados por el GAD.
Gracias, Frank, el pueblo cubano sabrá recompensarte.
http://www.miscelaneasdecuba.net/web/article.asp?artID=11821
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