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La Habana, 10 ago (EFE).- Disidentes y familiares de varios presos
políticos y comunes cubanos denunciaron hoy malos tratos, abusos y falta
de atención sanitaria en las cárceles de la isla, así como el silencio
de las autoridades a sus quejas.
Estas denuncias se realizaron durante la conferencia de prensa realizada
en la residencia del jefe de Oficina de Intereses de Estados Unidos en
La Habana, Michael Parmly, que también incluyeron los testimonios de
presos y ex-presos.
La disidente y ex-presa política Marta Beatriz Roque dijo que los casos
y testimonios traídos a la conferencia son "una muestra contentiva de
diferentes situaciones que incluyen los presos comunes, los cuales son
también objeto de violaciones de los derechos humanos".
Entre los participantes estuvo Pedro Larena, primo del disidente Manuel
Acosta Larena, miembro del grupo opositor ilegal "Movimiento
Democracia", quien el pasado 24 de junio apareció ahorcado en una celda
de la unidad policial en Aguada de Pasajeros (Cienfuegos, centro del
país), y las autoridades lo consideraron un caso de suicidio.
Larena recordó que su primo Manuel había sido detenido el día 21 y que
iba a ser procesado por el delito de "peligrosidad pre-delictiva".
Dijo que dirigió una carta al presidente en funciones de Cuba, Raúl
Castro, en la que le solicitó "una profunda investigación para
esclarecer todas las circunstancias que rodearon la muerte de mi primo
hermano", pero "todavía no he recibido respuesta, uno de los motivos por
los que me encuentro aquí en La Habana es para eso, para exigir la
respuesta del caso".
Yaraí Reyes, esposa del preso político Normando Hernández, uno de los 75
disidentes condenados en la primavera de 2003, también denunció la
situación de su marido en la prisión "Kilo-7", en Camagüey, donde dijo
que su estado de salud es "crítico" debido a graves trastornos
gastrointestinales, mala absorción de los alimentos e hipertensión, por
lo que ha solicitado a las autoridades una licencia extra-penal.
Refirió que las autoridades de la prisión le han manifestado que "se
olvide de la licencia extra-penal" a pesar de que los médicos del penal
han reconocido que Hernández padece "una enfermedad incompatible con el
medio penitenciario".
Durante la conferencia también fue presentada una denuncia grabada del
disidente preso Juan Carlos Herrera Acosta, quien reclamó "justicia" y
que sean encarcelados los responsables de la muerte de tres reclusos
comunes en la prisión de máxima seguridad "Kilo-8", tras una reyerta
carcelaria ocurrida el pasado 29 de julio.
Según Herrera Acosta, los presos Amaury Medina Puig y Carlos Labrada
Oses "resultaron asesinados con ensañamiento y alevosía" por los
carceleros que los reprimieron tras protagonizar una reyerta con otro reo.
Por su parte, Estrella Aramburu, madre de Harold Alcalá Aramburu y tía
de Mikel Delgado, ambos condenados a cadena perpetua en 2003 por el
secuestro de la lancha "Baraguá", denunció que tienen problemas de salud
y que no han sido bien atendidos en la prisión "Combinado del Este", en
La Habana.
"Estoy desesperada, he hecho cartas para todo el mundo y solo he
recibido una respuesta que es muy vaga, en concreto no se me dice nada
(...) y ellos siguen en las mismas condiciones luego de cuatro años y
medio presos", añadió.
El opositor José Luis García Pérez (Antúnez), quien estuvo 17 años
encarcelado, dijo que las condiciones en las cárceles que conoció "son
deplorables, el trato que reciben los presos es infrahumano y hay un
sentimiento antipreso, pero no solamente de los militares sino también
de los enfermeros y médicos".
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