2007-03-29.
Juan Carlos Linares Balmaseda, Periodista Independiente
28 de marzo de 2007. La Habana – Cuando Julio Aleaga Pesant entró al
domicilio, alrededor de la 1:00 de la mañana del martes 20 de marzo,
encontró a su madre angustiada, llorosa.
Él regresaba de visitar a sus dos hijos y a su esposa recién operada
en la provincia de Bayamo. Instante seguido la madre le comenta que un
oficial del Departamento de la Seguridad del Estado la había visitado y
la instó a que entregase la computadora personal de su hijo (Julio).
Ella accedió.
Julio es un publicista que alterna esa profesión con la de periodista
independiente. Tiene 46 años y su madre 80. Julio narra parte del
incidente de este modo:
"Me contó mamá que, un rato después de yo haber partido hacia la
Terminal, en la mañana del viernes 16 de marzo, un oficial de la policía
política, autodenominado Eliécer, se le presentó y le dijo que ellos lo
sabían todo. Que sabían que yo tenía una computadora con la que
trabajaba. No le mostraron orden de registro, ni acta de decomiso.
"La computadora era un elemento muy importante para mí, tanto como
herramienta para mi labor de periodismo como para la publicidad. Ahí yo
guardaba conocimiento acumulado por años. Datos particulares. Alrededor
de 1400 diapositivas de diversos sitios del país. Textos de todos mis
artículos. Información. Proyectos. Este equipo, en tan poco tiempo que
pude conservarlo, se convirtió en mi gran asistente. En mi secretaria
personal.
"Uno siempre espera las reacciones más terribles de la policía política
en Cuba. Pero pienso que la característica más relevante de este hecho,
por la forma en que fue ejecutado, es la manera tan cobarde que esta
gente se aprovechó de una anciana con miedo, y amedrentándola le quitara
la computadora de su hijo, conociendo mi madre lo importante que era
para mí este equipo.
"Este mismo oficial, está involucrado en un arresto arbitrario sobre mi
persona el 16 de noviembre del año pasado, donde me tuvo seis horas
detenido en una estación policial. El mismo oficial, que un tiempo
anterior hubiera intimidando a un colega mío, el periodista
independiente Ernesto Roque, colega que su familia la dejaron marcharse
del país y a él no le dan el permiso de salida; ahí conocí a este oficial."
Acerca de la presión que está ejerciendo la policía política sobre los
activistas que han recibido equipamientos de cámaras, impresoras,
computadoras, etc., como ayuda solidaria de organizaciones y de
gobiernos para que la sociedad civil pueda desarrollar un trabajo
capacitado, Julio juzga que se debe a dos motivos esenciales:
"El primero, como forma represiva para desestabilizar y amedrentar las
fuerzas vivas que avanzan a la democratización de la sociedad civil en
Cuba. Y específicamente para restar capacidad técnica a los periodistas
independientes, y con ello reducir su calidad y desempeño profesional.
"Un segundo objetivo puede estar marcado por los niveles tan altos de
corrupción dentro del Ministerio del Interior. Es muy probable que esa
computadora que me quitaron vaya a parar al buró de uno de los oficiales
del mando superior, o a manos de familiares o amigos de estos", aseveró
el periodista independiente y publicista, quien reside en calle 1ra #107
apartamento 3, entre calle C y calle D, Vedado, Ciudad de la Habana.
Concluye Julio Aleaga Pesant: "Tengo en preparación una denuncia, por
abuso de poder y por manipulación de una persona anciana, que en este
caso es mi madre. Este oficial violó las propias leyes que supuestamente
debía respetar. Por tanto, eso que hizo es una fechoría y un acto de
cobardía".
No comments:
Post a Comment