AGRICULTURA
Los seis cordeles de Primo
HÉCTOR REYES | Santa Clara | 23 Sep 2014 - 10:26 am.
Cuatro Vientos está en medio de las montañas, rodeado de buena tierra
cultivable. Como en todo el país, la cooperativa es la encargada de la
distribución.
Primo Cajales tiene 72 años y vive en Cuatro Vientos.
Un pueblo en las montañas que no tiene aún la edad de Primo. Un pueblo
aburrido con gente que se conoce tanto, y cuyo pasatiempo es la
curiosidad, tanto así que a las seis de la tarde muere la vida en Cuatro
Vientos y renace entre los chismes familiares.
Haciendo honor al nombre, el viento helado entra por los cuatro costados
de este pueblo, haciendo que los lugareños se recojan temprano a invocar
el chisme y la curiosidad. Sin embargo, Primo Cajales nunca sale ileso
de estos chismes.
"Hace cincuenta años mató a un hombre para robarle" y eso quedó tan
marcado en la escasa población de Cuatro Vientos que viene a ser, Primo
Cajales, algo así como el villano de su propia película.
Pero esta vez el chisme no es sobre asesinatos, ni sobre caza ilegal de
jutías, ni si el Gobierno lo ayudó dándole una casa nueva a Primo. El
comentario público es que es un viejo loco que sigue pidiéndole seis
cordeles de tierra a la cooperativa.
"Pá qué va a querer seis cordeles de tierra el viejo ese, como no sea pá
echársela arriba", comenta un guajiro que en su ingenuidad no entiende
que Primo necesita sembrar su propio consumo porque no tiene chequera y
aquí nada es gratis, incluso en Cuatro Vientos.
Cuatro Vientos está en medio de las montañas, y por supuesto, rodeado de
buena tierra cultivable. Como en todo el país, la cooperativa es la
encargada de distribuirlas para uso específico, amén de aquellos
montañeses afortunados que poseen fincas propias.
Primo Cajales no es un afortunado. Caza jutías ilegalmente que vende a
"gente legal" por el importe de 14 pesos. Tumba palmiche por un "Máximo
Gómez" y "hace cincuenta años mató a un hombre pá robarle". Primo quiere
sembrar su tierra.
La cooperativa lo ignora. Cuatro Vientos lo convierte en el villano de
su propia película, chismea sobre sus problemas y lo saluda
hipócritamente. Pero nunca nadie lo ha invitado a comer, ni siquiera le
han regalado una malanga o un aguacate.
El matrimonio que dirige la cooperativa no quiso responder a la pregunta
de por qué no se le puede asignar seis cordeles de tierra a Primo
Cajales. El dirigente municipal de Cumanayagua prometió revisar el caso
y aún se espera su veredicto. Los demás hacen silencio.
Mientras, Primo Cajales continúa en Cuatro Vientos. Caza jutías
ilegalmente. Tumba palmiche y siembra un conuco frente a la casa que le
dio el Gobierno luego que un ciclón tumbó su bohío. Aún espera por seis
cordeles de tierra para sembrarlos de autoconsumo.
"Los seis cordeles que pido", dice Primo, "están llenos de marabú.
Cuando voy a la cooperativa me dicen que no se puede talar el marabú. Y
por eso no me dan la tierra".
Parece ser que Cuatro Vientos es el único pueblo en Cuba con un área
protegida para el marabú.
Source: Los seis cordeles de Primo | Diario de Cuba -
http://www.diariodecuba.com/cuba/1411431399_10517.html
No comments:
Post a Comment