Pages

Friday, October 16, 2009

En serio o jugando?

¿En serio o jugando?
José Hugo Fernández

LA HABANA, Cuba, octubre (www.cubanet.org) - Livianamente misteriosa
resulta la actitud de ciertos periodistas extranjeros que en estos días
se afanan en vender gato por liebre mediante sus reportes desde La Habana.

Cuesta creer que responda a falta de agudeza profesional esa insistencia
en divulgar verdades a medias, donde la media que se queda oculta es
siempre lo más nutritivo de la verdad, o sea, lo que no conviene al
régimen que sea divulgado.

En un reciente reporte para BBC Mundo, Fernando Ravsberg otra vez
incurre en lo que ya parece ser uno de sus deportes favoritos: echar las
asaduras en torno a esta actitud quizá superficial, quizás pícara,
quizás timorata, o quizás connivente.

Según asevera él en su farragoso, Cubanos ya navegan en Internet, el
gobierno de Raúl Castro autorizó por fin el acceso de todos nuestros
paisanos a este medio.

Desde luego que Raúl Castro no ha hablado tan despacio sobre el
particular, ni con Ravsberg ni con nadie. Tampoco hizo pública hasta hoy
una disposición oficial donde conste literalmente que elimina la
prohibición de acceder a Internet. De hecho, es de prever que tal
disposición no sea dictada, porque no han existido nunca normativas
escritas para prohibir a los cubanos el tal acceso.

Los regímenes totalitarios no precisan de reglas ni decretos formales
para imponer sus atropellos. Al contrario, tienden a matarlas callando,
sin constancia escrita.

Lo que Ravsberg está anunciando categóricamente es la derogación de una
ley que nunca fue legislada, que no existe sino dentro de la difusa
sombra de nuestra dictadura, o sea, como parte de su organismo,
consustancial, inseparable.

Sin embargo, ello no ha impedido que el reportero se zumbara a celebrar
el supuesto levantamiento de la prohibición oficial, calificando el
hecho como de "una trascendencia enorme porque reconoce el derecho a la
libre información de los ciudadanos".

No hay que ser demasiado listo, ni tampoco hay que estar más que
mínimamente informado, para saber que uno de los derechos humanos que
con menos disimulo viola la dictadura en Cuba es el de la libre
información de los ciudadanos. No únicamente en lo referido a Internet,
sino a todos los soportes, medios, vías; todas las variantes que hoy
resultan comunes para la retroalimentación informativa de las personas
en el mundo real.

En el caso concreto de Internet, casi sobra repetir, ya que es
abundantemente conocido, que nuestras limitaciones, más que por una ley
o por un dictado en abstracto, están determinadas por los meticulosos
resortes que acciona el régimen para impedir que el ciudadano medio
pueda aspirar siquiera a este derecho.

Si son escasos (muy escasos) los cubanos que poseen computadora propia,
si la mayoría absoluta jamás ha navegado una sola vez en Internet y ni
siquiera sabe cómo hacerlo, y si muchos menos aún son los que pueden
disponer de una cobertura particular para el acceso, resultaría más que
ociosa, ridícula, una ley que lo proscriba. Es como prohibir que los
beduinos naden en medio del desierto.

Entre las pocas personas que en la Isla pueden acercarse a Internet con
alguna frecuencia, la generalidad lo hace desde sus puestos de trabajo o
de estudios, donde tropiezan –en este caso sí- con regulaciones
concretas y muy rigurosas que impiden, no ya la navegación con intereses
privados, ni aun el intercambio de correos electrónicos de carácter
familiar. Son regulaciones que se violan a diario, claro, pero existen,
y hasta este minuto no han sido suprimidas.

Únicamente a unos pocos privilegiados se les permite contratar cuentas
particulares para el acceso a Internet. Esta tropelía, que difícilmente
aparezca regulada por escrito, tampoco ha experimentado cambios hasta el
día de hoy.

Cualquier pelagatos con pasaporte extranjero que resida en el país puede
contratar fácilmente su acceso a Internet, pagando en CUC. Pero a ningún
nacional se le permite, aun cuando pague en la misma moneda. He ahí otra
prohibición que sigue en pie.

Cuba: ¿En serio o jugando? (16 October 2009)
http://www.cubanet.org/CNews/y09/octubre09/16_C_1.html

No comments: