Pages

Friday, September 08, 2006

Hacia la regresion demografica?

SOCIEDAD
Cuba: ¿hacia la regresión demográfica?

Oscar Espinosa Chepe

LA HABANA, Cuba - Septiembre (www.cubanet.org) - La tendencia de la
población cubana hacia la disminución de su crecimiento ha dado un giro
dramático, según los datos de 2005 publicados por la Oficina Nacional de
Estadísticas (ONE). Al final del año sólo había 2,545 cubanos más que en
igual fecha del 2004, para una ridícula tasa anual de crecimiento de 0.2
por 1000 habitantes.

La población en su conjunto fue estimada oficialmente en 11.243,836
habitantes. Este crecimiento es uno de los más bajos en toda la historia
de Cuba, si se exceptúa la etapa correspondiente a los años de la Guerra
de Independencia en el Siglo XIX y a 1980, debido a la estampida de
Mariel, cuando el saldo migratorio externo fue de -141,742 personas, lo
cual incidió en que existiera una tasa anual de crecimiento negativo de
-6.2 por 1000 habitantes.

Con estos datos parece poco probable que para 2010 se cumplan las
proyecciones demográficas de la ONE de que continúe creciendo
modestamente la población cubana. Todo parece indicar que ya para esa
fecha esté presente un fenómeno pronosticado por muchos especialistas de
que los cubanos seremos menos por haberse iniciado un proceso de
regresión poblacional en términos absolutos.

Según los datos de la ONE, la población de 60 ó más años de edad era a
fines de 2005 del 15.%. En 2010, será de 17.3% de acuerdo con estimados
oficiales, y en 2020 de 21.4%. El factor que más incide en el bajo
crecimiento es la baja natalidad (10.7 por mil habitantes), la cual en
estos momentos provoca que no exista la llamada tasa de reemplazo (una
hija por mujer como promedio). El descenso alcanzó un 5.4% con respecto
a 2004, y más del 66.0% con respecto a la natalidad de los años 1960.
Ese fenómeno se explica por la negativa de la familia cubana a
reproducirse debido a la falta de las condiciones mínimas de vivienda,
bajos salarios, dificultades con la alimentación y los cuidados que un
niño necesita; adicionalmente agravado por un continuado flujo
emigratorio, esencialmente de personas jóvenes.

Las cifras del anuario también reflejan cierto deterioro en 2005 de la
tasa de mortalidad infantil, que llega a 6.2 por 1000 nacidos vivos,
casi un 7% de incremento sobre el nivel de 2004. Este indicador resulta
ciertamente bajo a nivel internacional, pero hay que considerar que
ocurre en un país con una tasa de natalidad muy baja y una extendida
práctica de abortos ante cualquier duda de problemas con el feto.

Cuba desde antes de 1959 poseía una tasa de mortalidad infantil
realmente baja para la época: 32 por 1000 nacidos vivos en 1957 según
Naciones Unidas, y 34.7 en 1959, según estadísticas oficiales cubanas.
Entonces, las tasas de natalidad eran muy superiores a las actuales y
los medios asistenciales mucho menos desarrollados, por supuesto.

En las estadísticas se muestra una alta tasa de divorcios que sitúa a
Cuba entre los primeros 10 países a escala mundial de acuerdo con los
datos del Pocket Book 2006 de la revista The Economist, un factor en
modo alguno positivo para estimular la natalidad.

La esperanza de vida reflejada es alta, con 77 años para personas de
menos de un año; 77.1 los hombres y 78.9 las mujeres. Otros países de la
región -Costa Rica, Uruguay, Chile y Argentina- tienen datos similares.
Todos ellos con un índice de desarrollo humano superior al de Cuba,
calculado por las Naciones Unidas, sin que hubieran tenido que perder la
libertad durante tantos años, ni el respeto a los derechos humanos.

Llama la atención la información sobre los fallecimientos por las
lesiones autoinfligidas intencionalmente, brindada por la ONE, una
reducción de aproximadamente un 10% en relación con 2004, para una tasa
de 12.2 por 100 mil habitantes. Este epígrafe históricamente se titulaba
en las estadísticas cubanas ¨Suicidios y Lesiones Autoinfligidas¨, con
un índice acumulado de 18.8 entre 1971 y 2004, lo que hace dudar sobre
la reducción ahora anunciada.

De toda la información oficial presentada por la ONE puede concluirse
que existe un preocupante estado demográfico en Cuba, con un crecimiento
acelerado de su envejecimiento, lo cual ocasionará gastos sustantivos
para el sostenimiento de un segmento poblacional en continuo aumento.
Este proceso se aprecia en 2005 con la elevación de los fondos de
pensión en un 34.0%, sólo financiados por la contribución a la seguridad
social en un 60%, mientras el resto estuvo a cargo del presupuesto, con
la correspondiente limitación de otros requerimientos sociales. No
obstante, el promedio de las pensiones no rebasó los 180 pesos
mensuales, un equivalente a nueve dólares.

Esto demuestra la incapacidad de la sociedad cubana actual para
enfrentar el problema. No puede olvidarse además, que los gastos
ocasionados por el envejecimiento poblacional no sólo se producen por un
aumento del volumen de las pensiones, sino también por el incremento en
asistencia médica y otros requerimientos, como asilos. Todo esto ocurre
en un país con tasas muy bajas de productividad y en un ambiente de
menesterosidad que no permite hacer frente al reto del envejecimiento y
brindar a las personas en la tercera edad lo que requieren y merecen.

Este serio problema con el tiempo irá empeorando, tanto por la tendencia
a la baja en la natalidad como por la inclinación de muchos jóvenes a
abandonar el país en busca de un destino mejor.

Como conclusión puede señalarse que, en el marco de la crisis en que
está inmersa la sociedad cubana, este gravísimo problema no tiene
solución posible, si no se procede al mejoramiento del nivel de vida;
objetivo inalcanzable sin cambios en el actual sistema socioeconómico
que durante tantos años ha asfixiado a la nación.

http://www.cubanet.org/CNews/y06/sep06/08a6.htm

No comments: