disidentes
El gobierno español considera que en el último año se han registrado en
la Isla avances en temas como la pena de muerte, el número de presos
políticos, la economía y la libertad de expresión y crítica.
Agencias | 20/06/2008
El gobierno español considera que durante los meses de gobierno de Raúl
Castro se ha producido una "relajación del hostigamiento" a los
disidentes, informó EFE.
Éste es uno de los diferentes aspectos en los que el Ejecutivo de José
Luis Rodríguez Zapatero se habría apoyado para argumentar su posición a
favor de la eliminación de las sanciones diplomáticas impuestas por la
UE a La Habana en 2003.
En la cena de ministros de Exteriores celebrada este jueves en el marco
del Consejo Europeo, en Bruselas —donde se acordó levantar las
sanciones—, el canciller español, Miguel Ángel Moratinos, repartió un
cuadro comparativo sobre la situación en la Isla en 2008 respecto a 2007
elaborado por Madrid.
En esta tabla, se reseñan los avances que el gobierno español cree se
han producido en la Isla en materias como la pena de muerte, la
colaboración con organismos internacionales de derechos humanos, el
número de presos políticos, la economía y la libertad de expresión y
crítica.
Según el gobierno español, los "actos de repudio" han "desaparecido
prácticamente" en 2008 y hay una "relajación del hostigamiento a la
oposición" en cuanto a las amenazas a los disidentes y los arrestos de
corta duración.
Estas afirmaciones contradicen las de la oposición interna, que denuncia
constantes persecuciones, "actos de repudio", detenciones e interrogatorios.
En cuanto a los opositores que están en prisión, el gobierno español
contabiliza 229 presos políticos; 62 presos de conciencia (reconocidos
por Amnistía Internacional) y 55 del llamado "grupo de los 75", cuyo
encarcelamiento en 2003 provocó la imposición de las sanciones de la UE.
Madrid tiene en cuenta, además, que este año La Habana permitió la
salida de la cárcel hacia España de cuatro miembros del grupo de los 75.
Los cuatro disidentes fueron obligados por el gobierno cubano a elegir
entre permanecer en prisión o partir al exilio.
El gobierno español considera que el de Raúl Castro tiene una "actitud
más constructiva" y una "voluntad declarada" de prolongar la moratoria
sobre la pena de muerte, y recuerda que firmó recientemente el Pacto
sobre Derechos Civiles y Políticos y el de Derechos Económicos, Sociales
y Culturales de la ONU.
Respecto a las medidas económicas tomadas por el gobierno en los últimos
meses, las considera "elementos liberalizadores orientados a crear
algunos mecanismos de mercado", frente al "absoluto control estatal de
la economía" vigente en 2007.
Madrid menciona las decisiones en el sector agrícola, la eliminación de
prohibiciones sobre compra de ordenadores y teléfonos móviles, la
autorización para que los cubanos se alojen en hoteles y la posible
eliminación del sistema de doble moneda a medio plazo.
El gobierno español opina asimismo que se ha pasado en un año del "casi
absoluto control estatal de la información y del debate público" a la
constatación de "márgenes más amplios en materia de libertad de opinión
y crítica", con la aparición de blogs y la "apertura de un debate
nacional sobre las deficiencias del sistema".
El gobernante Partido Socialista Obrero Español (PSOE) dijo este viernes
que decisión de la Unión Europea sobre las sanciones de 2003 obedece a
una "estrategia inteligente" y a una "exigencia clara de respeto a los
derechos humanos".
En declaraciones a EFE, el portavoz del grupo socialista en el Congreso,
José Antonio Alonso, dijo que esa estrategia consiste, a su juicio, en
"ayudar a que en Cuba se produzca cuanto antes una transición a la
democracia".
Tras resaltar que la decisión de los Veintisiete fue tomada por
unanimidad, Alonso señaló que en la transición a la democracia de Cuba
tanto la UE como España "tendrán mucho que decir", pues ambos tienen en
la Isla "intereses éticos, políticos y económicos".
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