Centenares de afectados por el uso de pesticidas en Holguín
Vecinos del Caserío de Mayabe han sufrido fuertes intoxicaciones, como
consecuencia del uso de esas sustancias en una entidad agrícola
gestionada por las FAR.
Ivette García, Holguín | 21/06/2008
Vecinos del asentamiento Caserío de Mayabe, situado a seis kilómetros de
la capital provincial de Holguín, han sufrido intoxicaciones graves como
consecuencia del uso indiscriminado de pesticidas organofosforados y
organoclorados en una entidad agrícola estatal destinada a la producción
de vegetales para el turismo internacional.
Una fuente de la Dirección Provincial de Salud Pública confirmó, desde
el anonimato, a CUBAENCUENTRO.com que en las últimas dos semanas han
sido atendidas en urgencias más de cien personas aquejadas de cefalea,
parestesias, vómitos y debilidad muscular.
Agregó que ha sido creada una comisión gubernamental para palear la
situación que vive el asentamiento, a partir de la aparición de 37
nuevos casos, los cuales presentan niveles alterados de colinesterasa
(término que se refiere a dos tipos de enzimas).
"Es una fuerte señal de alerta que pone de relieve las deficiencias del
sistema preventivo y de seguridad laboral en las entidades agrícolas,
las cuales tienen orientaciones de no utilizar esos pesticidas por el
peligro que representan para la vida humana", declaró M. E., un
epidemiólogo transferido hasta el lugar, que pidió el anonimato.
Las Casas de Cultivos Protegidos de Mayabe son administradas por las
Fuerzas Armadas Revolucionarias (FAR) y han sido enclavadas a pocos
metros del caserío donde viven unas cien familias (unas 400 personas).
El propósito del enclave agrícola es el de producir vegetales para
vender en el mercado interno en divisas, especialmente a los hoteles del
polo turístico de Guardalavaca.
"Desde que hicieron las casas de cultivo vivimos en zozobra, siempre hay
un fuerte olor muy desagradable y nos venimos quejando por meses, pero
nos dicen que 'no hay que preocuparse'. Tenemos resequedad en la boca y
dolores en todo el cuerpo", dijo María, una ama de casa.
La preocupación mayor del gobierno en estos momentos es que los
pesticidas no pueden dejar de utilizarse, so pena de perder las cosechas
ya comprometidas. Un especialista del Ministerio de Salud Pública
consultado evitó realizar declaraciones, aunque no descartó la
posibilidad de que los vegetales cosechados presenten niveles de
pesticidas capaces de dañar a seres humanos.
La zona del Caserío de Mayabe ha sido literalmente tomada por
autoridades sanitarias y políticas, quienes intentan silenciar el hecho
y han amenazado a los afectados y a los movilizados en las tareas de
saneamiento en caso de organizar protestas por los sucesos.
En las últimas horas se han reportado nuevos casos de intoxicados por
los pesticidas, quienes presentan cuadros clínicos como insuficiencia
respiratoria y arritmia cardiaca, según declaraciones de J. P., un
especialista en medicina interna del Hospital Clínico-Quirúrgico de Holguín.
No obstante, el director Provincial de Salud Pública, Dr. Fernando
González, ha minimizado el hecho al decir que "todo está bajo control",
en una alocución el pasado sábado en un programa de máxima audiencia de
Radio Angulo, la emisora oficialista provincial, donde se ventilan
quejas formuladas por la población.
Varios obreros agrícolas que laboran en las Casas de Cultivos Protegidos
presentan síntomas de intoxicación, al parecer derivados de métodos no
seguros de fumigación.
"No tenemos las condiciones necesarias para dosificar los insecticidas,
ni contamos con los equipos de protección necesarios, dijo bajo
condición de anonimato un trabajador de la entidad, "yo mismo he bajado
más de veinte libras y tengo ronchas en las manos y en la boca", agregó.
Un informe preliminar elaborado por la comisión multilateral creada al
efecto, y al cual tuvo acceso CUBAENCUENTRO.com, indica que entre los
principales problemas que existen en Mayabe se encuentran la no
utilización de equipos de protección, las pobres condiciones de
ventilación de los almacenes, la no parametración de las dosis
utilizadas, la ubicación de las Casas de Cultivos Protegidos en pos del
viento, así como la violación del tiempo de espera luego de ser
establecidos los pesticidas (48-72 horas).
Especialistas del Ministerio de la Agricultura confirmaron que el
necesario control ambiental, mediante detectores de los pesticidas en el
aire, no ha sido utilizado nunca, por lo que los pobladores del lugar
pudieran haber sido expuestos a intoxicaciones desde que los productos
comenzaron a utilizarse, hace unos tres años.
Según un informe publicado por la Revista Cubana de Higiene y
Epidemiología, en el territorio holguinero se ha registrado en la última
década el 5% de los casos de fallecimientos por intoxicación con
plaguicidas en el país.
En Cuba fallecen alrededor de cien personas anualmente por intoxicación
con plaguicidas. De esas muertes, más del 40% están relacionadas con
organofosforados y un 9% con daños provocados por los organoclorados,
detalla el estudio.
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