20-04-2011.
Angélica Mora
(www.miscelaneasdecuba.net).- El Sexto Congreso del Partido Comunista de
Cuba ha cerrado sus puertas. Fueron cuatro días de desfile, debate y
alguna música en las calles. Hoy los delegados están regresando a sus
pueblos de origen envueltos en el desaliento, que para colmo no pueden
demostrar públicamente.
Los únicos que ganaron (más tiempo) fueron Raúl Castro y el resto de la
Cúpula gobernante, donde la máxima consigna es salvarse como se pueda.
Desde Santiago de Cuba, Ernesto Vera representante de la agrupación
opositora Concilio Cubano, coincide con esa apreciación al decir que "
la jugada política de los Castro es ganar tiempo a ver qué pasa luego...."
Desde Placetas el opositor Jorge Luis García Pérez "Antúnez" comentó en
Twitter: "los dirigentes barrigones en congreso y el pueblo pasando
hambre..."
Esas son las percepcionees generales que se sienten en la Isla y que he
podido contactar a través de llamadas telefónicas y mensajes desde la
misma Cuba: Al cierre de este VI Congreso hay un enorme sentimiento de
fatalismo donde se mezclan el miedo y la resignación. Según me dicen, lo
que se comenta calladamente es enorme desconfianza hacia el gobierno y
un enorme temor hacia días peores.
Esto se debe a que una vez más el peso de la situación económica ha
caído sobre las espaldas del pueblo. Los cubanos deberán trabajar más,
sin apoyo estatal y en su mayoría deberán buscar -en forma
independiente- los medios para procurarse las materias primas y el
diario sustento.
El temor más grande es que desaparezca por completo la libreta de
abastecimientos y los subsidios de salud y educación se reduzcan al
mínimo, afectando a toda la población de la Isla.
Hay muchos que se burlan de la propuesta de Raúl Castro de limitar el
mandato de los funcionarios de gobierno a dos periodos de cinco años.
Ernesto Vera señala: "Raúl (Castro) habló de solo dos mandatos de 5
años. Pero sólo tendrán derecho los comunistas y proclives a la
dictadura, no habló de elecciones. Por eso -agregó- debemos presionar
muy fuerte para arrancarle nuestra libertad..."
Las virtuales "trompetillas" del cubano de a pie me dicen que suenan por
toda la isla en respuesta al discurso del gobernante Raúl Castro y
especialmente la burla general está dirigida a la parte en que habló del
relevo.
Fidel Castro gobernó 48 años y sólo lo sacó del puesto una enfermedad,
que en un principio se creyó fatal. E incluso en ese estado lo hizo a
Raúl su Heredero y le pasó el cetro en el 2006. Ahora el Reemplazante,
pese a sus casi 80 años, no ha hablado que se va a retirar. Por el
contrario, no piensa dejar el poder y sólo lo abandonará cuando se
muera... o un mal lo incapacite visiblemente, como a su hermano.
Lo único tangible de este VI Congreso es que las amenazas de Raúl Castro
contra la oposición que "no iba a impedir al pueblo que defendiera la
Revolución" ya se están cumpliendo.
Envalentonada y empujada por esas palabras, una turba atacó a la
activista Sara Martha Fonseca Quevedo y su familia. Luego de una brutal
paliza y destrucción del hogar de la opositora, la policía procedió a
arrestarla.
La disidente es vocera del Frente de Resistencia Cívica y Desobediencia
Civil "Orlando Zapata Tamayo" y una de las líderes del Partido Pro
Derechos Humanos, afiliado a la Fundación Andrei Sajarov. Y esto es sólo
el comienzo de una nueva era de acoso a la disidencia interna.
No he querido ahondar mucho con cifras y estadísticas la sombría
realidad desprendida de este Sexto Congreso. Lo que he querido es traer
a este artículo el sentimiento de gran parte del cubano de a pie, que se
pregunta angustiado en estos momentos:
¿Si en 52 años no se ha hecho nada, por qué ahora las cosas van a
cambiar para mejor? Y desgraciadamente, tiene razón en estar desconfiado.
http://www.miscelaneasdecuba.net/web/article.asp?artID=32013
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