2008-05-20.
La Habana, 12 de mayo de 2008.- Hay amos inescrupulosos que apelan al
látigo para conseguir esfuerzos extras de sus bestias cuando están
cansadas. Nada más parecido a la política del nuevo gobernante, que
exige de los cubanos trabajar más duro como solución a la crisis del país.
Los hechos indican que el Sr. Raúl Castro consigue ser su principal
detractor, a la hora de desmentir la falsa campaña que lo muestra como
un reformista.
Desde su ascenso al poder los medios informativos le conceden el favor
de atribuirle cualidades de las que carece y, como si fuera poco,
resaltan como cambios meras medidas cosméticas sin impacto real en la
población.
No hay que ser académico para comprender que tras 50 años de fracasos y
de destrucción en Cuba, sobran razones para optar por la única salida
viable; desmontar el modelo político actual.
Aferrarse al continuismo desestima, además, el contexto global,
desfavorable por la crisis alimentaria con la subida del costo de los
alimentos, las cifras record en los precios del petróleo, y la inestable
situación política de los Chávez, Correa, Morales y Ortega.
¿Cuál es la significación de designar en los cargos claves del gobierno
a las figuras ultra conservadoras? ¿Acaso militarizar las principales
instituciones del Estado condiciona la democratización?
Lejos de afrontar la realidad con la aprobación de verdaderas reformas,
como serían el reconocimiento de los derechos y libertades fundamentales
de los cubanos, aunque sea de modo paulatino, el menor de los Castro
insiste en incrementar el control social y los mecanismos de represión.
Es conocido que hace meses retomó la creación de las brigadas de
respuesta rápida en los Comités de Defensa de la Revolución (CDR) por
cada manzana, centros de trabajo y estudiantiles ¿Para enfrentar a quién?
Su declarada guerra contra las "indisciplinas sociales", constituye un
claro mensaje dirigido a reprimir a todo aquel que no se conforme con la
miseria extrema y con la dependencia absoluta del Estado.
Medidas estas que sí afectan a toda la población, a diferencia de los
elogiados cambios, como alojarse en hoteles, comprar equipos eléctricos
o alquilar autos, que solo benefician a un número restringido de
personas, por brindarse dichos servicios en divisas de las que carece la
mayor parte del pueblo.
Para despejar cualquier posible duda, en la Plaza Cívica, a escasos
metros de la sede del gobierno, semanas atrás la seguridad del estado
agredió a las Damas de Blanco durante una protesta pacífica que exigía
la excarcelación de sus familiares, condenados por convicciones
políticas. Ni siquiera la junta militar que aterrorizó a la Argentina
cometió acciones tan viles contra las Madres de Plaza de Mayo.
Lo que identifica el mandato del actual amo de la Isla es su clara
incoherencia, en la práctica una pésima copia de su hermano. Al tiempo
que reconoce la necesidad de cambios estructurales profundiza en la
centralización del Estado y se la juega a la supervivencia del sistema
totalitario.
Aunque el gobierno firmó los pactos de Derechos Humanos de las Naciones
Unidas, en Artemisa, provincia de La Habana, el pasado 7 de mayo
arrestaron y 12 horas después condenaron a dos años de privación de
libertad, en juicio sumarísimo, al joven Maikel Bencomo Rojas, por tener
tatuado "Abajo Fidel" en su espalda. Para mayor aberración jurídica no
le permitieron contratar abogado defensor, ni contó con uno de oficio.
La política del gobierno de Zapatero, que asume la mediación ante el
bloque Europeo para el levantamiento de las sanciones contra la tiranía,
y destaca como positivo la creación de un mecanismo sistemático de
diálogo sobre derechos humanos con sus pares cubanos, no pudo evitar que
las autoridades de la isla le negaran a Yohanis Sánchez participar en la
entrega del premio Ortega y Gasset en España, que le fue otorgado por el
diario El País.
En estos momentos, cuando se pretende aparentar una supuesta glasnot con
llamados que estimulan la "crítica" de los errores e insuficiencias,
declaraciones oficiales insisten en la política de excluir a los cubanos
del acceso a la Internet, además, decenas de periodistas independientes
siguen condenados en prisión por cuestionar al régimen.
Lo inesperado de la sucesión y la acuciante acumulación de problemas
extreman las complicaciones de la vida nacional. El heredero del poder
manifiesta que la conducción de la revolución se transforma del estilo
de mando personal del Sr. Fidel Castro al manejo institucionalizado a
través del Partido Comunista ¿Qué justifica postergar el atrasado
Congreso de esa institución para dentro de año y medio?
Otras distinciones atribuidas a la nueva jerarquía del país es que no
está centrada en la política internacional y sí en las cuestiones
domésticas ¿Qué función cumplen entonces los miles de agentes de la
inteligencia que permanecen en Venezuela, Bolivia, Ecuador? ¿Por qué se
mantienen intactos los programas de la seguridad del estado en la
infinidad de países donde opera?
Con todas las evidencias a flor de piel, todavía hay prestigiosos
analistas que especulan sobre una tal incógnita del Raulismo.
Castro II, con su ambivalencia, aumenta la frustración generalizada y
decepciona a los que creyeron en su política de aparentes reformas. En
su intención de manipular a todos no queda bien con nadie. A estas
alturas es el máximo responsable de exponer a la Nación cubana a un
trágico final como salida.
http://www.miscelaneasdecuba.net/web/article.asp?artID=15407
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