El futuro segun Roby

POLITICA
El futuro según Roby

Luis Cino

LA HABANA, Cuba - Julio (www.cubanet.org) - Roby no me sorprendió. Ya
casi nada me sorprende. Después de todo, para fabricar exitosas
cancioncillas pop no se precisa demasiada inteligencia. Sólo que no
imaginaba que, para componerlas, algunos de los requisitos fueran hablar
mucha bobería y estar loco de remate. O aparentar estarlo, que también
de poses está hecho el tiempo que nos ha tocado.

Roby Graco Rosa, el autor de "Living la vida loca", "La Copa de la Vida"
y otros hits de Ricky Martin, luego de su visita a Cuba declaró a
Televisión Española que había viajado "al país del futuro".

Curioso modo de soñar el futuro. Roby avizora un mañana de hambre,
sudor, escaseces, apagones. Con ronchas y mítines de repudio. Sin
Publix, Mc Donalds, Internet, Wall Marts ni libertades. Sin lumínicos,
comerciales en TV ni vallas publicitarias. Sólo las que pregonen, a los
que no se han dado cuenta, que "Vamos por el camino correcto". Con pocas
luces, sólo las estrictamente necesarias, con bombillos ahorradores.
Apretujados en un camello que sortea los baches, a ritmo de reggaeton, a
toda máquina hacia el desastre.

Como dirían los aseres que se sientan en la esquina de mi casa, que
aunque Roby no conoció durante su visita descargan su musiquita en sus
atronadoras grabadoras: Qué clase de loco más loco.

Aparte de la antes mencionada circunstancia de la poca inteligencia,
Roby debe haber conocido pocos cubanos en su viaje. Funcionarios,
empleados de hotel, el elenco del show y alguna jinetera son un pobre
muestrario para opinar sobre los cubanos. No obstante, Roby afirma no
haber visto nunca "una juventud tan creativa". ¿Qué sabe él lo que es
vivir la vida loca?

Lástima de viaje tan corto y limitado. Qué pena que tuviera que regresar
al consumismo despiadado. Cruel destino el de Roby, que no le permite
compartir nuestra dicha.

De cualquier modo, para él están abiertas las puertas del futuro, es
decir, del comunismo cubano. La invitación está extendida ya. Sólo tiene
que reservar pasaje en el primer vuelo hacia Cuba.

Aquí lo acogeremos radiantemente pobres, pero solidarios. Será feliz en
una barbacoa de Centro Habana. Nos regocijaremos con él por seguir
siendo eternamente miserables. Lanzaremos nuestras esperanzas a una
fogata de basura sin recoger en una noche de apagón. Brindaremos con
chispa de tren y picadillo de soya.

Cuando ya Roby esté a punto de abordar una balsa, entonces lo llamarán.
Sus cancioncillas pueden servir al Comandante para amenizar el próximo
guateque.

http://www.cubanet.org/CNews/y06/jul06/07a9.htm