Inder Bugarin
Bruselas
Aunque algunos consideran las recientes reformas anunciadas por el
presidente cubano Raúl Castro como cosméticas, posiblemente serán
suficientes para que la Unión Europea elimine las sanciones diplomáticas.
Las sanciones fueron impuestas en 2003 como respuesta a la detención de
75 disidentes. Dos años más tarde España convenció a la UE de
desactivarlas, mas no de eliminarlas.
Para Manuel López Blanco, director de la unidad de la Comisión Europea
para las relaciones con el Caribe y los territorios de ultramar, las
decisiones tomadas por el nuevo presidente cubano abren "una ventana de
oportunidades y si bien no sabemos qué tanto esté abierta, habría que
aprovecharla".
Con la tesis bajo el brazo de que las medidas anunciadas por Raúl Castro
podría ser el preámbulo de la transición que muchos esperan, el
Comisario de Ayuda Humanitaria, Louis Michel, le pedirá a los socios de
la UE debatir la eliminación de las sanciones durante su reunión anual
para revisar la política común con Cuba, que suele celebrarse en junio.
"Sí al levantamiento definitivo (de las sanciones) si tiene valor
añadido", señala Blanco, quien reconoce que éste es el requisito que
impone Raúl Castro para la reactivación de las relaciones.
Una oportunidad
La Comisión Europea interpreta el paquete de reformas como una
oportunidad que puede generar cambio social
Manuel López Blanco
Según Blanco, desde la perspectiva del comisario belga Louis Michel, el
levantamiento de las restricciones a la telefonía celular y la
eliminación de prohibiciones como la posibilidad de alquilar un auto,
son gestos que no pueden pasar por alto.
Tampoco echa al saco roto la liberación de siete presos políticos en
febrero pasado, ni la firma de dos protocolos de derechos humanos, el
Pacto Internacional de Derechos Sociales, Económicos y Culturales y el
Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos.
"La Comisión Europea interpreta el paquete de reformas como una
oportunidad que puede generar cambio social. Pero necesitan de un
acompañamiento que no excluye el diálogo sobre derechos humanos", dijo
Blanco durante su reciente participación en una conferencia
internacional sobre Cuba celebrada en la sede del Comité de las Regiones
de la UE.
"La Comisión propone una política no condicional, abierta al diálogo y a
la normalización plena de las relaciones".
¿Cálculo desastroso?
"Raúl no ha dado ningún paso positivo", le dice a BBC Mundo el
periodista Alejandro González Raga, liberado y deportado a Madrid en
febrero pasado.
"Las presuntas reformas sólo están beneficiando a las figuras cercanas
al poder. La UE no debe ser incongruente reconociendo un régimen que no
respeta las garantías individuales", opina.
En entrevista, Jaime Mayor Oreja, vicepresidente del grupo del Partido
Popular Europeo, concuerda diciendo que no pueden premiarse cambios
cosméticos y advierte que un mal cálculo de Bruselas podría resultar en
un desastre para Cuba.
Las reformas no significan un cambio profundo, verdadero, ni tampoco
implican una decisión de las autoridades cubanas de desmantelar los
mecanismos de control y represión
Caleb Charles McCarry
"No hay razón para modificar la posición común. No hay cosa peor que
favorecer la imagen de quién no cambia", denuncia el eurodiputado español.
Las posturas encontradas trascienden hasta el interior de la UE.
Mientras el gobierno español promueve la reactivación de las relaciones,
República Checa y el Reino Unido reclaman el endurecimiento de la
política comunitaria.
Sin señales de cambio
Mientras el debate crece de tono en Bruselas, Estados Unidos no ve
ningún signo en Cuba que amerite un cambio de su política.
Para el coordinador de la transición en Cuba del Departamento de Estado
estadounidense, Caleb Charles McCarry, los cubanos no quieren
computadoras y conexión a internet, sino una transición de fondo.
"Las reformas no significan un cambio profundo, verdadero, ni tampoco
implican una decisión de las autoridades cubanas de desmantelar los
mecanismos de control y represión", le dice a BBC Mundo.
McCarry afirma que EE.UU. no cambiaría su actitud hacia Cuba hasta que
los presos políticos regresen a sus hogares y se desarrollen elecciones
democráticas.
"Para establecer un diálogo directo el primer paso sería que las
autoridades cubanas dejen de encarcelar simplemente por discrepar con su
gobierno y permitir que todos los presos políticos regresen a sus casas".
Al hacer un fino análisis de las elecciones presidenciales, McCarry
adelantó que no importa quien llegue a la Casa Blanca, demócratas y
republicanos coinciden en la importancia de apoyar a los cubanos que
abogan por un cambio democrático, y mientras la transición no llegue,
continuará el embargo contra Cuba.
Nota de BBCMundo.com:
http://news.bbc.co.uk/go/pr/fr/-/hi/spanish/latin_america/newsid_7413000/7413052.stm
Publicada: 2008/05/22 17:49:56 GMT
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