2008-05-18.
Osvaldo Alfonso Valdés, Ex Prisionero de Conciencia y Analista Político
de Misceláneas de Cuba
Las especulaciones en torno a nuevas medidas del gobernante Raúl Castro
continúan en Cuba. Se hablan de varias, como por ejemplo la posible
autorización a comprar y vender casas, así como la venta de automóviles.
Como ya hemos dicho, nada de esto cambia la esencia del la dictadura
totalitaria, ni constituye una disminución en la violación de los
derechos fundamentales de los cubanos.
Una de las medidas más esperadas y de las que se sigue especulando
mucho, es la posible eliminación del permiso de salida que los cubanos
necesitan para poder viajar al exterior. Sin embargo, en lo concreto
nada han dado a conocer oficialmente las autoridades y existen muchos
rumores.
Hay que señalar a propósito de los rumores, que esto es una táctica muy
bien pensada por el régimen. Por un lado, les permite tomar tiempo
mientras mantiene a la opinión pública tanto nacional como internacional
con las expectativas, y por otro, cuando finalmente anuncia la medida en
cuestión esto va acompañado de toda la publicidad que ellos buscan,
sobre todo hacia el exterior para así por un lado satisfacer a quienes
quieren ver algún cambio significativo en la isla, y por otro a los
ingenuos que creen que el régimen cubano está cambiando.
Se rumora que en realidad, en cuanto a lo de la eliminación del permiso
de salida, lo que cambiará sería el método de concederlo. Ya no serían
las autoridades de Migración quienes lo otorgarían si no los Comités de
Defensa de la Revolución, CDR. De ser así, esto no será más que un
cambio de fachada, pues todos sabemos que los CDR para nada son una
organización independiente; por el contrario, es un engranaje que le ha
servido muy bien sobre todo al Ministerio del Interior y a los órganos
represivos para controlar a los ciudadanos. Seguirán obteniendo el
permiso de salida aquellos cubanos que la Policía Política considere que
puedan hacerlo.
Por otra parte, esta medida buscaría revitalizar una institución que si
bien les es útil a los aparatos represivos y de control, ciertamente la
participación masiva de la ciudadanía en los CDR es sumamente baja
teniendo en cuenta que es la mayor de las llamadas organizaciones de
masas del país. El Gobierno cubano conoce mejor que nadie, el alto
índice de cubanos que quieren abandonar la isla. Al transferirle a los
CDR la potestad de conceder el permiso de salida, no están haciendo otra
cosa que aprovecharse de los deseos de ese gran porciento de cubanos que
quieren emigrar o viajar al exterior y de ese modo, por la necesidad de
acumular méritos ante los CDR para obtener el permiso, que los
ciudadanos participen en las actividades de apoyo a la tiranía. No es
nada más ni nada menos que un método de chantaje al pueblo, sacando
provecho de la doble moral en la que se ven obligado a vivir los cubanos.
De chantajes al pueblo está llena la historia de la mal llamada
revolución. No olvidemos en los años 60 y 70 cuando los que querían
salir del país debía previamente ir a trabajar a labores agrícolas, a
veces durante años, a pesar de que podía tratarse de profesionales. ¿Que
pasará? Pues que todo el que desee emigrar o viajar al extranjero, se
convertirá en un buen cederista para garantizar el visto bueno para
poder obtener el permiso. Eso, por una parte; por la otra aumentará la
corrupción que ya es rampante en Cuba y veremos a los dirigentes de esos
Comités extorsionar a quienes no tienen "buena conducta" para de ese
modo concederles la salida.
Y todo esto el Gobierno de Cuba lo sabe, solo que no les importa. A
ellos no les interesa que el apoyo que le muestren los cubanos sea
auténtico, no son tan tontos para creer que de verdad la mayoría del
pueblo los quiere. Son cínicos, pero no tontos, y en eso sí, son
realistas, en saber que aún a pesar del descontento del pueblo, tienen
los mecanismos de control en sus manos, y se valen de ellos. Nada más.
Lo lamentable de todo esto es que nuestro pueblo sigue atrapado en medio
de la falta de escrúpulo de quienes tienen el poder. ¿Cuánto tiempo más
hará falta para que los ingenuos en el mundo, y dentro de Cuba, se
convenzan de que la tiranía comunista sigue siendo la misma, y que solo
la presión desde dentro y desde fuera, traerán la posibilidad de los
verdaderos cambios que merecen los cubanos? Para lograr esto, también
hay solo un camino, la lucha política pacífica dentro y fuera de nuestro
país.
http://www.miscelaneasdecuba.net/web/article.asp?artID=15381
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