Un dramático touchdown

Un dramático touchdown
9 Mayo, 2017 6:56 pm por Julio Aleaga Pesant

El Vedado, La Habana, Aleaga Pesant, (PD) Daniel Llorente, un habanero
de 52 años, es un controvertido ciudadano transformado en foco para los
medios de comunicación internacionales en el acto "supremo" de los
trabajadores el 1ro de mayo: como quarterback corrió a lo largo de la
Plaza de la Revolución, convertida en su estadium personal, y marcó
touchdown a la dictadura.

De manera planificada, Daniel Llorente se acercó paso a paso, desde muy
temprano en la madrugada del primero de mayo, hasta la primera fila de
los marchantes. Calculó cada uno de sus pasos, su indumentaria, todo. En
el segundo preciso antes de comenzar el desfile, pasó por debajo del
cartel político que le cerraba el paso y se lanzó a correr, rompiendo
todas las barreras de seguridad que existían entre el dictador y sus
siervos. Su solitario corrido del hectómetro con las banderas de Cuba y
Estados Unidos, se convirtió en poco tiempo en una persecución de
safeties y "cornerbacks" que no terminó en tackles, sino en un aquelarre
de patadas y piñazos de los asustados esbirros contra el alegre electrón.

Para algunos opositores, ese tipo de acción hace el juego al gobierno.
Para otros, es un gesto independiente de rebeldía que hay que respetar y
apoyar.

El órgano oficial de la dictadura, el Granma, rápidamente y de manera
poco común se refirió al hecho con el consabido ataque personal.

Tanto el gobierno como la familia afirman que este Mathias Rust cubano
cumplió 9 años de prisión, de 17 a que fue condenado tiempo atrás.

Mathias Rust fue un joven germano-occidental que el 28 de mayo de 1987,
hace treinta años, casualmente, aterrizó un pequeño avión Cessna en la
Plaza Roja de Moscú, en el centro del imperio soviético.

Rust puso al descubierto la debilidad del sistema de seguridad antiaéreo
soviético. Cumplió 400 días de cárcel en Lefortovo de los cuatro años a
los que fue condenado, pero provocó la renuncia del ministro de defensa
soviético Mariscal Serguei Sokolov, a quien el reformista Mijaíl
Gorbachov le tenía echado el ojo por conservador.

Cuáles serán las consecuencias del acto heroico o descabellado, según el
prisma, aun no lo sabemos.

Hasta el momento la familia denuncia que no se conoce el paradero de
Daniel Llorente, luego de ser detenido por la policía política.

Los rivales del ministro del Interior Julio Cesar Gandarilla, tienen un
excelente motivo para pedirle la renuncia, aunque por suerte para él,
Daniel no gritaba ¡Allahu-ákbar! ¡Allahu-ákhbar! ¡Al lahu-ákhbar!
aleagapesant@nauta.cu; Aleaga Pesant

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