Biblioteca de La Casa de las Américas: ¿un proyecto de desinformación?
En Cuba las bibliotecas, aunque públicas, son instituciones excluyentes
viernes, septiembre 25, 2015 | León Padrón Azcuy
LA HABANA, Cuba – Desde hace diez años la Casa de las Américas se ha
enfrascado en lograr un proyecto para el rejuvenecimiento de una amplia
biblioteca en la que quedarán reunidos los fondos existentes con el
patrimonio epistolar, fotográfico y sonoro que conserva la propia
institución.
Ya se ha trasladado parte de los títulos de la Biblioteca José Antonio
Echeverría, que aún permanece a un extremo de la sede de Casa de la
Américas, hacia una vieja casona que colinda con la Hemeroteca, ambas
ubicadas en la calle G, entre Línea y 9, en el Vedado, actualmente
sometidas a reparación capital.
Dicho proyecto, que todavía no tiene fecha de terminación, lo ejecuta la
empresa EPROYIV, y tiene como inversionista principal a la Casa de las
Américas, quien ha contratado los servicios de una brigada de
trabajadores por cuenta propia de la provincia de Matanzas, con
experiencia en ese tipo de restauración, pues han laborado en las
edificaciones del Coro de La Habana, el Gran Teatro, y en la última
Feria del Libro.
Refiere un mural informativo, colocado a la entrada de la Hemeroteca:
"La biblioteca actual de la Casa de las Américas cuenta con más de 250
000 volúmenes de libros y de publicaciones periódicas. Por sus fondos
exhaustivos de literatura de América latina y el Caribe se le ha
considerado una de las más completas del mundo dentro de su clase.
Conserva numerosas y valiosas documentaciones de instituciones y
personalidades del mundo. Archiva grabaciones de sonidos videos y
fotografías de artistas, escritores e intelectuales".
Según la enciclopedia colaborativa oficialista EcuRed, "por Ley del 28
de abril de 1959 se decidió crear La Casa de las Américas y el 4 de
julio, en un acto oficial, presidido por el Ministro de Educación,
Armando Hart, fue inaugurada la nueva institución, cuya primera
directora fue Haydée Santamaría". Lo cierto es que el régimen se
aprovechó de lo que era la Casa Continental de Cultura, ubicada en 3ra y
G, en el Vedado, muy cerca del malecón habanero, adueñándose del
edificio, construido al estilo Art Decó tardío durante la década de
1940, y al costo de un millón de pesos, para la Sociedad Colombista
Panamericana. Allí estuvo la importante sede de la Asociación de
Escritores y Artistas Americanos, donde se editó la revista América.
Cubanet salió a indagar sobre los beneficios informativos que traerá a
la población, –sobre todo a los amantes de la lectura y de la
información veraz–, la culminación de este ambicioso proyecto.
Una funcionaria de la Casa de las Américas, que prefirió el anonimato,
explica que la institución "permitirá, entre cosas, consultar buenos
libros y publicaciones periódicas, manuscritos valiosos, audiovisuales,
mapas y literatura en general".
Sin embargo, sobre tal acceso a la información, expresa el ensayista y
político Manuel Cuesta Morúa: "Mientras no se respeten las libertades
esenciales en la Isla, lógicamente todas las bibliotecas, librerías o
centros audiovisuales, que están bajo la anuencia del gobierno, son
excluyentes".
Y explica que "en la biblioteca de la Casa de las Américas, tú no podrás
encontrar las obras, por solo mencionar alguno ejemplos, de Carlos
Alberto Montaner, Raúl Rivero, George Orwell, Carlos Ripoll, Roberto
Luque, Norberto Fuentes, Heberto Padilla, Guillermo Cabrera Infantes y
otros tantos escritores, que han sido desterrados de nuestra cultura por
el solo hecho de pensar diferente".
Comenta el escritor Luis Iglesias Pérez, miembro de la Unión Nacional de
Escritores y Artistas Cubanos (UNEAC): "En La Biblioteca Nacional José
Martí durante años los libros de los escritores repudiados por el
gobierno fueron excluidos. Por suerte, esa etapa de oscurantismo, ha
sido rebasada para algunos", precisó.
"Recuerdo que la ficha bibliográfica de Antón Arrufat no aparecía en los
catálogos por Autor, y ni siquiera se recogía su nombre en la primera
edición del Diccionario de Literatura Cubana, como si nunca hubiera
existido, y se lo dije a la novelista Mary Cruz. Hasta en las necesarias
librerías de uso se escondían sus libros, lejos de la mirada del
público. Fíjate si fue así, que después de ser perdonado, parte de su
obra se colocó en los estantes de La Avellaneda, en la calle Reina, y yo
compré nuevecito un ejemplar de Los siete contra Tebas. Lo llamé por
teléfono para que comprara una gran cantidad de sus libros allí. Días
después me dijo contentísimo: Me siento como si me hubieran recién
editado", añade Iglesias Pérez.
También otro entrevistado, Víctor Manuel Domínguez, periodista y
escritor, declaró: "Se puede afirmar que la revolución cubana rompió con
los intelectuales librepensadores, desde aquel discurso de Fidel Castro
el 30 de junio de 1961 (Palabras a los intelectuales), cuando pronunció
su desastrosa frase 'dentro de la Revolución todo; contra la Revolución,
nada'. Esto hace excluyente a esta institución, y por ende, a su
biblioteca. Como respuesta a tal actitud totalitaria surgió el Club de
Escritores Independientes de Cuba".
Finalmente, en conversación con Teresita Castellanos, directora de la
Red de Bibliotecas Independientes Reynaldo Bragado, concluyó: "Sólo en
nuestros estantes los lectores cubanos encontrarán las revistas, los
folletos y los libros censurados por el régimen, el cual viola
constantemente el artículo 19 de la Declaración Universal (de los
Derechos Humanos): Todo individuo tiene derecho a la libertad de opinión
y de expresión; este derecho incluye el de no ser molestado a causa de
sus opiniones, el de investigar y recibir informaciones y opiniones, y
el de difundirlas, sin limitación de fronteras, por cualquier medio de
expresión".
Leonpadron16@gmail.com
@leonlibredecuba
Source: Biblioteca de La Casa de las Américas: ¿un proyecto de
desinformación? | Cubanet -
https://www.cubanet.org/mas-noticias/biblioteca-de-la-casa-de-las-americas-un-proyecto-de-desinformacion/
No comments:
Post a Comment