El 26 de julio y el convidado de piedra
JUEVES, 01 DE AGOSTO DE 2013 13:00
ESCRITO POR JULIO ANTONIO ALEAGA PESAN
Cuba actualidad, El Vedado, La Habana, (PD) Santiago de Cuba, capital
del Caribe insular, fue sede de la última maniobra internacional de la
dictadura, con la creación de una columna de humo que enmascare el
conflicto creado con la detención de un buque en Panamá que lleva armas
a Norcorea en violación de las resoluciones de las Naciones Unidas que
impiden las transacciones de armamento.
Como cada cinco años, la celebración más importante del calendario
revolucionario, el acto por el asalto al Cuartel Moncada, volvió al
lugar del crimen. Los protocolos y las extremas medidas de seguridad que
acompañan a Raúl Castro Ruz, fueron ridículos en medio de la abulia
general de la población, afectada por la grave crisis económica que
afecta a todo el país y en especial a la zona oriental.
Los bajos salarios, los graves índices de desempleo, subempleo,
deserción escolar y tasa migratoria hacia otras provincias, unidos al
impacto de un huracán el año pasado que afectó el parque de viviendas,
son los motivos más importantes para que los santiagueros no se sientan
comprometidos por las celebraciones.
Las autoridades se empeñaron en inaugurar monumentos como el dedicado a
Juan Almeida, o asignar millones de pesos a la restauración de la Plaza
Antonio Maceo, a restablecer la señalización vial para dar una imagen de
normalidad ante la visita de políticos extranjeros.
Diez mil santiagueros, según cifra oficial, fueron designados para estar
en la gran plazoleta del antiguo cuartel Moncada, hoy Ciudad Escolar 26
de julio, escoltados por una gran fotografía de más de diez metros de
alto de Fidel Castro Ruz, líder del fracasado ataque.
Si una característica tuvo el espectáculo en esta oportunidad es la
amplia presencia de presidente latinoamericanos y bolivaristas. Evo
Morales (Bolivia), Daniel Ortega (Nicaragua), José Mujica (Uruguay),
Nicolás Maduro (Venezuela), además del canciller de Ecuador y los
primeros ministros de Dominica, Antigua y Barbuda, San Vicente y las
Granadinas y Santa Lucía, acompañaron a los altos jerarcas de la
dictadura militar, de manera inédita en la cantidad de presidentes
presentes en 54 años de conmemoraciones oficiales.
El discurso de los politicastros extranjeros estuvo marcado por el
disparate, la chanza, el antinorteamericanismo militante y la exaltación
de la "solidaridad cubana" con sus países. El acto se convirtió en una
maratónica "carrera de relevos" extendida durante más de dos horas y
media, y que el público no veía cuándo acabaría.
Tal presencia y retórica intenta construir un consenso hacia el exterior
tras el incidente del buque que llevaba armas cubanas a Norcorea,
detenido hace más de una semana en la República de Panamá, mientras
espera por la visita de especialistas de las Naciones Unidas.
El incidente del barco se convirtió en el convidado de piedra de un
espectáculo político, donde faltaba el responsable de la situación, el
General de Cuerpo de Ejército Leopoldo Cintra Frías, ministro de las
Fuerzas Armadas y responsable de la transacción económica.
La orden de ir a Santiago de Cuba la dio el espurio Presidente de
Venezuela, Nicolás Maduro. Dos días después de la detención del carguero
por las autoridades panameñas, Maduro anunció que estaría en las
celebraciones del asalto al Moncada y seguidamente, los presidentes de
la Alianza Bolivariana y sus satélites de las pequeñas islas del Caribe
se sumaron a la comparsa. También se sumó el payaso uruguayo José
Mujica, que vino a la isla a "llorar" sus nostalgias de viejo terrorista
tupamaro redimido por la democracia.
El General Presidente Raúl Castro Ruz, orador principal, en una corta y
leída alocución, prometió que el Estado asegurará el desarrollo de la
ciudad de Santiago de Cuba, destruida luego del huracán Sandy (octubre
de 2012). Luego se remitió a reconstruir rápidamente y de manera
triunfalista los hechos de los últimos sesenta años. Y se refirió
patriarcalmente al proceso de entrega de "manera paulatina" de las
"responsabilidades del gobierno" a otra generación de líderes comunistas.
No se refirió al escándalo internacional que lo rodea y que debe
terminar más temprano que tarde en una resolución que lo sancione en la
Organización de las Naciones Unidas. No le hizo falta: el trabajo sucio
lo hizo la "izquierda carnívora y presidenciable" latinoamericana. Pero
el tema estaba en la mesa, aunque no le pasaran el platillo del postre.
Para Cuba actualidad: aleagapesant@yahoo.es
Source: "El 26 de julio y el convidado de piedra | Cuba noticias
actualidad.Periodismo independiente." -
http://www.primaveradigital.org/primavera/politica/54-politica/8195-el-26-de-julio-y-el-convidado-de-piedra.html
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