Yoani y el exilio

Publicado el lunes, 04.01.13

Yoani y el exilio
Armando González

La gira internacional de la disidente cubana Yoani Sánchez ha sido
ampliamente cubierta por los medios informativos en Estados Unidos,
Europa y América Latina. En el ámbito local, mi colega Fabiola Santiago
en su columna semanal en The Miami Herald nos brindó una información
excelente más sus impresiones personales sobre la comparecencia de Yoani
en el auditorio Tishman de la neoyorquina New School. De interés
particular fue su descripción de la versión importada de un "acto de
repudio" y su verdadero significado: "El objetivo de un acto de repudio
no es el expresar un punto de vista diferente –que es valioso en nuestra
democracia– sino interrumpir un evento y/o desacreditar a un individuo".
Este es un concepto fundamental porque describe el procedimiento
favorito de la extrema izquierda que se ha puesto de manifiesto donde
quiera que Yoani ha sido invitada. La dictadura cubana no puede
controlar el programa de eventos para Yoani, pero puede planear el
protestar y movilizar simpatizantes y secuaces que traten de reproducir,
fuera de Cuba, lo que ellos han perfeccionado dentro de Cuba.

Yoani ha podido conducirse muy bien. Su actitud y comportamiento han
demostrado inteligencia y madurez y ha dado muestras de agudeza política
al contestar preguntas malintencionadas de los simpatizantes y secuaces
de la dictadura cubana que han estado presentes en sus comparecencias.
Mi agudeza favorita: su deseo expresado de preguntarle a Mariela Castro,
hija de Raúl y sexóloga-en-jefe si, "ahora que los cubanos pueden salir
del armario sexual, ¿cuándo podrán salir del armario político?".

En su entrevista con Ian Vásquez en el CATO Institute en Washington,
Yoani describió las llamadas "reformas raulistas" como "ajustes para
conservar el poder". Lamentó el "abandono por parte de gobiernos en
Europa y Latinoamérica de la causa de una Cuba libre", y expresó su
firme deseo y objetivo de "una Cuba donde quepan todos los cubanos". De
un gobierno comprometido con los más altos principios democráticos y una
economía de libre empresa.

Pero fue en Puebla, México, donde, invitada por la Sociedad
Interamericana de Prensa (SIP), Yoani tuvo su mejor actuación. La SIP
oficializó su nombramiento como Vicepresidente Regional basada en Cuba
el cual Yoani aceptó e identificó como "protección" contra lo que pueda
planear la dictadura castrista contra ella después de su retorno. La SIP
informó a sus miembros que el blog de Yoani, Generación Y, es uno de los
diez blogs más celebrados del mundo. Yoani, por su parte, presentó
críticas contundentes contra el gobierno de Cuba. Calificó la libertad
de prensa en Cuba como "calamitosa". Y criticó severamente el hecho de
que Cuba no ha preparado un relevo generacional.

Yoani también expresó ante la asamblea de la SIP que "no creo que el
sistema de gobierno imperante en Cuba sea reformable" y utilizó una
analogía interesante: "Es como pensar que las viejas casas, los viejos
edificios que se están cayendo solos puedan ser reparados. La solución
es reemplazarlos". Y expresó sus esperanzas que la tecnología de
comunicaciones sea uno de los recursos para efectuar cambios en Cuba.
Ella cree firmemente que "si algo está cambiando en Cuba es en el
interior de los cubanos".

Para aquellos cubanos exiliados, naturalmente escépticos después de
tantos años de decepciones, la actuación de Yoani Sánchez en los varios
foros donde compareció, debe ser reconfortante. Ella ha dicho que se va
de vuelta a Cuba a continuar su labor que ahora será posiblemente aún
más difícil que antes. Pero se lleva consigo el calor y la admiración de
los que han tenido oportunidad de conocerla más de cerca.

Aun las protestas han traído resultados interesantes. A su llegada al
aeropuerto de Recife, Brasil, su primera parada en la gira, Yoani se vio
en medio de una protesta organizada y financiada por la embajada de Cuba
en Brasilia. Cuando esto fue reportado por la prensa brasilera la
reacción popular fue radical contra los manifestantes castristas. Yoani
pudo ver innumerables pancartas diciendo: "Perdónanos, Yoani, esos no
somos nosotros" y los seguidores brasileros de Yoani en twitter
aumentaron a 35,000 más que los que ya tenía.

A la dictadura castrista le ha salido el tiro por la culata. Pero les
queda un último cartucho: Miami. Y aquí hemos oído amenazas de "actos de
repudio" cuando llegue Yoani. Para los que planeen eso, una pregunta:
¿De qué lado están? Y una advertencia: si van a hacer la labor de la
dictadura castrista se tendrán que quitar la careta. Y, de ahí en
adelante, tendrán que darle la cara al exilio.


AGonzalez03@live.com

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