[22-03-2012]
Mario Hechavarria Driggs
Periodista Independiente
(www.miscelaneasdecuba.net).- La unidad nacional antidroga de la
policía, llamada "LACRA", lleva realizando desde el pasado fin de
semana, intensos operativos contra el comercio y el consumo de
narcóticos en el municipio capitalino de Centro Habana. Se considera,
que esta zona es la de mayor narcotráfico en el país.
Para detectar y neutralizar a vendedores y consumidores, la policía
utiliza perros entrenados, la colaboración de informantes y personal
médico especializado.
En el malecón habanero, se dan cita los fines de semana, cientos de
jóvenes que desean compartir y pasar el buen rato. Este lugar es
aprovechado por personas inescrupulosas para vender drogas, alcohol o
pastillas, sin importarles las consecuencias que le puedan traer a los
que allí se reúnen.
El precio de un cigarrillo de marihuana, es de tres a cinco pesos moneda
convertible; el valor depende de la procedencia. Si la hierba es
colombiana vale más, la cubana vale menos por tener baja calidad. La
cocaína puede costar quince pesos convertible el gramo.
El precio de los psicofármacos, como el Parkisonil, la Carbamazepina, y
la Teofilina, son a diez pesos el par de pastilla, los sedantes como el
Diazepam, a veinticinco pesos cuatro pastillas, todo en moneda nacional.
La botella de alcohol preparado (no se sabe con qué) llamado "Chispa de
Tren" vale sesenta pesos, esta última es la que más daño hace.
Los traficantes detenidos por "LACRA", son conducidos para la unidad de
Instrucción Penal del Ministerio del Interior, ubicada en la calle 100 y
Aldabó, municipio Boyeros. Allí son procesados y presentados ante los
tribunales, donde pueden recibir largas condenas de cárcel.
Los adictos (enfermos) son llevados para el Hospital Psiquiátrico de La
Habana, allí reciben tratamiento de desintoxicación. Luego se mantienen
bajo estricta vigilancia para conocer cómo es que consiguen la
"mercancía" y quién la suministra.
En Cuba consume grandes cantidades de todo tipo de drogas, a pesar que
el gobierno trata por todos los medios de ocultar esta triste realidad.
Estos son algunos ejemplos:
Drogas estimulantes: Café, Tabaco, Te Negro y Te de Campanilla, a tomar
en grandes cantidades, además de los psicofármacos.
Drogas sedantes: Morfina, Heroína, Somníferos y Anestésicos de todo tipo.
Drogas duras: Marihuana, Cocaína, Alcohol, el Éxtasis y la famosa
Piedra, que tanto daño ha hecho.
Debido al gran problema que existe por las adicciones, la Iglesia
Católica y las Iglesias Cristianas, han abierto salas de reunión para
los Alcohólicos, Drogadictos y Neuróticos Anónimos, allí se comparten
experiencias y se reza por todos.
Algunos opinan que la carencia de recursos económicos, la desintegración
de la familia, la falta de valores y sobre todo ¿qué hacer con el tiempo
libre?, hacen que los jóvenes cubanos busquen vías de escape ante una
realidad frustrante. Pero lo cierto es que la persona que consume drogas
con la pretensión de olvidarse de situaciones desagradables, lo único
que logra es agrandarlas, para caer en un terrible círculo vicioso.
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