2008-02-21.
Luis Tornés Aguililla
" Si no soy libre, prefiero el marabú ".
Febrero de 2008.- A estas alturas, los servicios del Estado cubano saben
perfectamente que la mayoría del pueblo es consciente del carácter
ineluctable del derrumbe del sistema envuelto en sus propios vahos.
Raúl Castro tampoco podrá enderezar la caótica situación del país porque
en el secreto de los fueros de sus conciencias, hace rato que el cubano
de a pie pasó la página ante un par de tipos que, como las FARC en
Colombia o como Hezbollah en el Líbano estaban decididos a fusilar a sus
rehenes con tal de salvarse ellos. (Recordemos aquí a los tres jóvenes
fusilados en 2003 por ser negros y por pobres).
Ya vemos como lo que queda del dinero del níquel y del turismo (después
del reparto entre bandidos) no alcanza para poner coto a la delincuencia
generalizada en los campos y ciudades de Cuba donde la juventud no tiene
trabajo ni otra perspectiva que el alcoholismo y la trasgresión y si,
además, agregamos eso de que el abastecimiento en petróleo depende de un
venezolano dado a patéticas payasadas, entonces no caben dudas que el
Gobierno cubano tiene que buscar una solución a la imposible gestión del
país antes de que la situación se convierta en un alud incontrolable.
La renuncia de Fidel Castro no sólo fue un paripé entre ellos sino una
necesidad para seguir ganando tiempo mientras más de 200 rehenes se
pudren en las cárceles de la isla .
LA HORA DE LA OPOSICION
Ahora la oposición al régimen castrista podría con mayor fuerza explicar
a la población, la esencia liberticida de ese gobierno y la posibilidad
real de hacer de Cuba, ahora mismo, un país democrático si la oposición
se generaliza y llega a un punto de masa crítica.
¡Y vaya usted a saber!, a lo mejor....hasta la linda flor del marabú
camagüeyano que tanta pena le da a Raúl Castro podría convertirse en
emblema de la inconformidad general.
http://www.miscelaneasdecuba.net/web/article.asp?artID=14075
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