29-08-2011.
Angélica Mora
(www.miscelaneasdecuba.net).- Muchísimas veces al tocar el tema de Cuba,
he hablado sobre "el aumento en la escalada represiva" contra la
oposicion interna. El término lo comencé a usar cuando trabajaba en
Radio Martí y preparaba mis despachos diarios y luego los resúmenes del
fin de semana.
Veinticinco años más tarde sigo empleando el mismo título, pero con el
contenido noticioso mucho más grave y angustioso que en el pasado.
En estos últimos tiempos se ha acrecentado el acoso, se ha hecho diaria
la persecución a los miembros de la disidencia y se ha refinado la
estrategia para amedentrarlos.
El empleo de perros y ahora de gas lacrimógeno para reprimir a los
disidentes, son medidas de fuerza que antes no eran usadas, lo cual
demuestra la desesperación de Raúl Castro, quien teme que la ola mundial
que exige libertad y democracia, lo barra a él también.
Dos opositoras cubanas llevaron a cabo el viernes pasado un cacerolazo
que recibió el apoyo de una multitud de unas 300 personas. Y eso no lo
puede seguir permitiendo el gobierno de La Habana.
En mensajes que me llegan desde Cuba se comenta que el Régimen está
aterrado de ser la próxima dictadura en caer después de la de Hussein y
Gadafi.
Esta desperación puede originar tragedias debido al empleo de la
violencia desenfrenada. El número de heridos de este fin de semana
aumentó considerablemente y hay un saldo de más de medio centenar de
detenidos.
Asimismo, como ya se ha hecho costumbre, las Damas de Blanco y las de
Apoyo fueron acosadas este domingo por turbas paramilitares y miembros
de la Seguridad del Estado al ir o salir de las iglesias.
Por todo esto, aumenta el temor que en cualquier momento la reciente
violencia ordenada por el Régimen de Raúl Castro produzca las primeras
víctimas fatales.
http://www.miscelaneasdecuba.net/web/article.asp?artID=33432
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