El problema de Cuba y la vergüenza de ser español
Viernes, 21 de julio de 2006
Viendo lo que está sucediendo estos días en Cuba, hoy, de nuevo, estoy
bajo de ánimos. Las noticias que me llegan hacen que sienta vergüenza de
ser español.
A una pareja de periodistas y sus tres hijos se les ha denegado la
salida en el aeropuerto José Martí, por motivos ignotos, a pesar de
poseer la visa necesaria para viajar a Miami. A una enfermera se le
requiso la cámara con la que intentaba dar reflejo gráfico de la tortura
del Sr. Fariñas, en huelga de hambre para protestar por el nulo acceso a
Internet de los cubanos y que por desgracia pronto pasará a mejor vida.
A un conocido le han invadido su propiedad en Venezuela y le han
conminado a emigrar a España, so pena de matarlo en presencia de su
mujer y de sus tres hijos. En la prisión de Kilo 8, en la región donde
se cultiva buen tabaco, se supo que de nuevo otro preso se había cosido
la boca en protesta por la negativa de sus carceleros a que tuviera
visitas con su familia. Y así seguiríamos comentando durante muchas páginas.
Es por todo lo anterior que me avergüenzo de mi nacionalidad. ¿Dónde
están los españoles de bien?
Bajo el pretexto de que las medidas firmes contra el comandante no han
dado resultado, la tibieza del Sr. Zapatero está encubriendo los
constantes atropellos contra los derechos humanos cometidos en Cuba
contra todo aquel que ose no comulgar con la doctrina impuesta.
Lo están haciendo en España. Ayer mismo el Sr. Rajoy pudo comprobar en
carne propia lo que en Cuba se denomina un acto de repudio, con la
diferencia de que aquí, en España, la Policía, de momento, lo defendió.
En Cuba, la Policía los organiza y apoya y se llega hasta la agresión
física, hasta el extremo de colgar a una persona de un puente.
El objetivo único del binomio Prisa-PSOE es que el PP se vea
identificado con todo lo malo y llevar a que los españoles lo equiparen
con la extrema derecha, la idea la firmaría el aparto propagandístico
del partido de Hitler sin ningún rubor. Sólo buscan el sillón a
cualquier precio.
Los españoles debemos exigir que los derechos de nuestros compatriotas
en el extranjero sean respetados. Debemos reprobar de igual modo la
lamentable situación de la libertad en Arabia Saudí que en Cuba, pero es
un deber moral mayor el que nos exige que miremos a el Caribe e
Iberoamérica porque, históricamente, somos más responsables que el resto
del mundo, no en vano fuimos los primeros en llegar.
Por todo lo anterior, conmino a los responsables de esta página y a sus
lectores que se constituyan en portavoces de los que no tienen voz y
denuncien la connivencia de los actuales representantes del Estado
español ante el disparate que están cometiendo y el que están a punto de
cometer. La ley de la memoria histórica puede ser el comienzo de un
nuevo enfrentamiento entre los españoles, no en vano, muchos opinan que
en Cuba, cuando muera Fidel, se liarán a machetazos. Aquí no hay
machetes, pero a lo mejor empezamos a tirarnos los vasos de caña a la
cabeza en el bar de la esquina.
En fin, desde mi más honda preocupación, animo a todos los españoles de
bien a que desde los instrumentos que están a su alcance ejerzan su
derecho a alzar la voz contra un gobierno que nos está avocando al
desastre. Y desde este teclado manifiesto mi más profunda admiración a
todos aquellos que día a día encuentran la esperanza para poder vivir en
condiciones infrahumanas un día más.
http://www.elconfidencial.com/rincon/indice.asp?edicion=21/07/2006&pass=
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