Solo para extranjeros

SOCIEDAD
Sólo para extranjeros

Rafael Ferro Salas, Abdala Press

PINAR DEL RIO, Cuba - Enero (www.cubanet.org) - Un amigo y yo decidimos
ir un restaurante de la ciudad. En esta ciudad hay algunos sitios en los
que usted puede comer algo. Pero pocos lugares merecen tener la
categoría de restaurantes.

Lo cierto es que salimos a comer ese día. Mi amigo tuvo la brillante
idea de ir al restaurante de un hotel en esta ciudad. Le aseguro al
lector que no íbamos muy optimistas. En Cuba la palabra optimismo se
perdió hace ya buen rato. Llegamos al sitio y nos enfrentó el portero.
En honor a la verdad no puedo decir que nos recibió.

"¿Qué quieren ustedes?", interrogó el señor portero con una mirada de
pocos amigos.

"¿Podemos entrar para comer en el restauran?", dijo mi amigo.

El mulato de la puerta nos miró de arriba abajo como registrándonos y
nos dijo: "¿Ustedes son extranjeros?"

"¿Tenemos tipos de extranjeros? Somos cubanos, como tú", le respondí.

Mi respuesta no le gustó al hombre. Miró a todos lados y se nos acercó.
Bajando la voz nos dijo: "Son cubanos como yo, pero no trabajan aquí. No
pueden entrar entonces".

Cuando lo escuché hablar me di cuenta de que mi pesimismo al salir con
mi amigo no era infundado. "¿Desde cuando dieron esa orientación en este
hotel?", indagó mi decepcionado acompañante.

"Hace más de una semana. Lo siento, yo no los puedo dejar entrar".

Sin decir nada más, el portero se alejó de nosotros para recibir a dos
extranjeros que llegaban. Saludó a los visitantes y los invitó a entrar.
Pasó junto a nosotros como si nunca nos hubiéramos visto. Entonces
decidimos irnos.

Una hora después, mi amigo y yo estábamos sentados en el parque de la
ciudad. "Nos quedamos sin restaurantes también", me dijo, mientras
terminaba de comer su pizza.

"Creo que nos estamos quedando sin muchas cosas", le respondí.

Entonces salimos a buscar un lugar donde tomar un poco de agua. Fue un
día bien lleno de sorpresas. Habíamos salido con la idea de comer en uno
de los pocos restaurantes de la ciudad y terminamos degustando las
pizzas de vendedores particulares.

http://www.cubanet.org/CNews/y06/jan06/26a9.htm