La leche de Raúl
Juan González Febles
LA HABANA, Cuba - Septiembre (www.cubanet.org) - Un nuevo refrán recorre
La Habana. Llegó en sustitución del ya tradicional, 'Cuando la rana críe
pelos'. La nueva versión afirma: 'Cuando Raúl dé la leche'.
Reír con las tribulaciones y vivir bajo la dulce convicción de que "las
penas se van cantando", es característica reconocida en nosotros los
cubanos. El nuevo refrán reafirma esta caracterización sociológica o
sicológica. Además, es indicativa de la poca confianza a que se han
hecho acreedores Raúl Castro y el gabinete que encabeza.
Algunos opinan que todo no fue más que puro teatro. Raúl Castro hace una
afirmación pública recogida por la prensa internacional y la prensa
oficial la silencia dentro de la Isla. El mensaje parece decir: Fidel
Castro está vivo y lo regañó. Raúl Castro juega otra vez al escolar
cogido en falta. De nuevo Raúl Castro dice en público, lo que no debió
decir. La pregunta de rigor es: ¿Será cierto?
La situación remeda otra similar que se remite al año 1989. En aquel
momento, se ventilaba el asunto de la participación del régimen cubano
en el contrabando internacional de drogas. Allí nació la Causa # 1,
seguida por la Causa # 2. El asunto desembocó en el fusilamiento de
cuatro altos oficiales de las Fuerzas Armadas y del Ministerio del
Interior (MININT).
La cosecha lúgubre de aquel momento se anotó al otrora poderoso Ministro
del Interior. El general José Abrantes murió en misteriosas
circunstancias en la cárcel. Cumplía una sanción de veinte años de
privación de libertad.
En aquella ocasión fue televisada la reunión que sostuvo Raúl Castro con
el generalato cubano. Allí expresó cosas que de forma inexplicable para
aquel entonces fueron borradas en las versiones oficiales ofrecidas con
posterioridad por los medios.
La afirmación hecha el pasado 26 de julio en la conmemoración del
frustrado asalto al cuartel Moncada en 1953, sobre un vaso de leche para
cada cubano, desató los duendes del choteo. Es lógico. Son muchas las
promesas hechas desde 1959 que han quedado en palabras que el viento se
llevó. Perder la credibilidad conlleva burlas e impopularidad. No puede
ser de otra forma.
En la actualidad, el gobierno más impopular de la historia republicana
de Cuba es, sin duda alguna, el gobierno de Raúl Castro. Una de las
formas (las pocas que existen) para manifestar inconformidad con el
gobierno, es satirizarlo. Pero más allá de la sátira, el saldo es desolador.
El gobierno resolverá la situación nacional "cuando la rana críe pelos"
o "cuando Raúl dé la leche". Para el caso es lo mismo. Felizmente, el
mensaje final podría ser: el tiempo se les acaba.
jgonzafeb@yahoo.com
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