Cuentapropistas prevén una subida de precios tras el fuerte aumento de los impuestos a las importaciones

Economía

Cuentapropistas prevén una subida de precios tras el fuerte aumento de
los impuestos a las importaciones
Agencias - DDC
La Habana 03-09-2012 - 12:00 pm.

La nuevas normas que afectarán la recepción de paquetes en la Isla
entran en vigor este lunes.

Un fuerte aumento de los impuestos a las importaciones, que entra en
vigor este lunes, amenaza con complicarle la vida a algunos de los
nuevos empresarios cubanos y significará un aumento de precios a muchos
de sus clientes, pues elevará el costo de bienes, informa la AP.

Las nuevas medidas significan un alza pronunciada en los impuestos al
transporte internacional de carga, así como a muchas de las mercancías a
granel que llevan los pasajeros de aerolíneas, una fuente de suministro
crucial para muchas de los pequeños negocios privados que el Gobierno
dice querer alentar para reducir el tamaño de las plantillas en la
hinchada burocracia de la economía socialista.

El Gobierno insiste en que el impuesto es similar a los que hay en otros
países, pero muchos comerciantes lo ven como un indicio de peligro.

Aunque la descripción oficial de bienes afectados parece enfocada en
artículos como ropa, jabón, alimentos y otros bienes de uso personal, es
tan compleja que ha provocado inseguridad entre los importadores de
otros productos por la posibilidad de que se vean afectados, ahora o en
el futuro.

Algunos de los empresarios, como Javier Ernesto Matos, dicen que se han
preparado para el golpe mediante el acopio de bienes antes de que el
impuesto entre en vigor.

Añaden que también están preparados para el peor de los casos, si el
suministro se interrumpe por completo.

"La estrategia que hemos pensado es agruparnos todos en uno mismo y
dejar los mismos precios para sacar la inversión que sea", explicó
Matos, quien junto con dos socios abrió tres negocios de reparación de
teléfonos celulares llamado "La clínica del celular".

Otros dicen que no tendrán más remedio que subir los precios y eso
preocupa a los consumidores en un país donde el salario mensual promedio
equivale a 20 dólares.

De espaldas a la realidad

"Para nuestros familiares son artículos importantes, desde un jaboncito
hasta la mochila para la escuela", escribió una mujer que solo se
identificó como Loraine en el cibersitio estatal Cubadebate. "Todos
hacemos sacrificios para ayudarles, nada cae del cielo. ¿Por qué se
ponen de espaldas a la realidad? Sabiendo de las tantas carencias que
hay en el país, ¿por qué ser tan rigurosos?".

El diario oficial Granma publicó este lunes un reporte en el que intenta
explicar las nuevas disposiciones aduaneras que entran en vigor
referentes a los envíos por vía aérea, marítima, postal o de mensajería.

Según el diario del Partido Comunista, entre esas disposiciones figura
la unificación del método de valoración de los envíos aplicando la
alternativa Peso-Valor, donde 1 kg de misceláneas será igual a 10 pesos.

Para determinar la valía de los productos que no clasifiquen como
misceláneas (efectos electrodomésticos y otros bienes duraderos), se
emplearán mecanismos como la factura de las mercancías y la declaración
de valor, que se aplicarán individualmente sobre cada artículo.

En el caso de las misceláneas, se utilizarán técnicas como el despacho
automatizado de los envíos, en el que se obtiene el peso del contenido,
dijo la subdirectora de Técnicas Aduaneras, Carmen Arias Suárez, citada
por Granma.

A las regulaciones, contenidas en la Resolución No. 122 de la Aduana, se
sumarán este mismo 3 de septiembre las indicadas en la Resolución No.
223 del Ministerio de Finanzas y Precios; de acuerdo con las cuales el
pago de los derechos aduaneros por personas naturales que reciban
envíos, será en pesos convertibles.

"El límite en estos casos —dijo Arias Suárez— es de 200 pesos. De ellos,
los primeros 30 (o su equivalente en 3 kg de misceláneas) son libres de
impuestos; o sea, que si el valor de los artículos del envío topa el
límite dispuesto, el pago no superaría los 170 CUC", un precio muy
elevado para los cubanos.

Las nuevas regulaciones para la recepción de paquetes siguen a la
Resolución 222 del Ministerio de Finanzas y Precios, que estableció las
tarifas arancelarias que deben pagar los viajeros sobre los artículos
importados sin carácter comercial, y que entró en vigor el pasado 2 de
agosto.

En este caso, no varió "el hecho de considerar los primeros 25 kg del
equipaje como efectos personales y, por tanto, libres de pago; ni la
exención de aranceles de 10 kg de medicamentos, de prótesis, libros
científicos o silla de ruedas para inválidos", indicó Granma.

"Además, los artículos importados sin fines comerciales cuyo valor no
exceda los 50,99 pesos tampoco pagarán derechos de aduana", agregó.

"Para los productos que superen ese importe (50,99 pesos) y alcancen los
500,99 pesos, los derechos aduaneros serán del 100 % de su valor (o sea,
se pagarán por la misma cantidad de su valor); y para los que oscilen
entre los 501 y 1.000 pesos, del 200 % (el doble)", dijo el diario.

En cuanto a la moneda en que deben liquidarse esos impuestos, Arias
Suárez dijo que la pago de la primera importación realizada en el año
calendario por parte de cubanos y extranjeros residentes en la Isla se
realizará en pesos cubanos (CUP), mientras que el de la segunda se hará
en pesos convertibles (CUC), abonados en CUP según la tasa de cambio
vigente para la población.

El pueblo será el más afectado

Aunque el Gobierno afirma que quiere ampliar el sector privado, ha hecho
poco para crear negocios mayoristas donde las empresas puedan comprar
las partes y materiales para los productos que venden, así que numerosas
mercancías no están disponibles o se cobran a precios demasiado caros.

Algunos de los nuevos impuestos parecen dirigidos contra las "mulas",
como se denomina a las personas que viajan con frecuencia a sitios como
Ecuador, Panamá y Miami y vuelven con bolsos repletos de comida, ropa
interior, zapatos y artículos electrónicos.

El impacto ya lo está resintiendo gente como Rafael, un comerciante de
unos 50 años que importa ropa en La Habana. Antes, él pagaba un
equivalente de 65 dólares en la moneda local para importar 550 libras
(120 kilogramos) de ropa. Bajo el nuevo programa de impuestos
progresivos, al parecer tendría que pagar entre 1.300 y 1.800 dólares.

"Esta idea de aumentar los impuestos es descabellada. Yo no sé de dónde
salió esta decisión porque esto afecta a todo el mundo", expresó Rafael,
citado por la AP. "Pero al que más va a afectar es al pueblo, porque
vamos a tener que subir los precios".

Los altos precios que ya pagan los cubanos por unos pantalones vaqueros
como los que vende Rafael —cuestan en promedio el equivalente al salario
de un mes— subirán inicialmente entre dos y tres dólares por prenda y
podría subir aún más, dijo.

El comerciante no quiso dar su nombre completo porque la licencia
comercial que tiene solamente le permite producir ropa, pero en la
práctica se dedica a la venta de ropa importada.

Las nuevas normas afectarán principalmente los puestos de ropa y las
boutiques, pero también podrían afectar el suministro de artículos como
uñas artificiales para los salones de belleza, o tela, botones y
cremalleras para las modistas.

También podría hacer más difícil que algunos cubanos puedan visitar a
sus familiares en el extranjero. Los viajes son financiados a menudo a
cambio de que el viajero transporte bolsas grandes a nombre de alguien
que pagó su boleto aéreo.

Matos, de la Clínica del Celular, dijo que duplicó sus compras normales
durante el tercer trimestre y que ha acumulado suficientes partes, como
las frágiles cintas electrónicas, para sobrevivir en el negocio durante
dos años más, pase lo que pase.

"Si se encarece más la compra y se trae menos, entonces sí, hay que
evaluar lo que uno tenga y se va a tener que subir el precio",
manifestó. "En cambio es malo porque si sube el precio, no todo el mundo
va a venir lo mismo, no vale la pena".

No está claro si algún negocio estatal ofrecerá algunos de los servicios
que ya ofrece la Clínica, como desbloquear un iPhone 4.

La ley y la trampa

Las autoridades dicen en que simplemente tratan de mejorar el servicio
en los aeropuertos cubanos, donde el exceso de equipaje congestiona las
bandas transportadoras. A mediados de agosto, el portal estatal
Cubadebate publicó la explicación oficial de las tarifas y ofreció
varios ejemplos.

No obstante, eso hizo poco por aliviar la inquietud, a juzgar por las
decenas de quejas de lectores publicadas en la sección de comentarios.

"¿Por qué un ciudadano cubano tiene que pagar los impuestos en moneda
con la cual no se le paga?", dijo alguien que se identificó como Roberto
Suárez. "Eso no es justo, yo no viajo, pero no le veo lógica".

Hay quienes afirman que las nuevas normas harán que los comerciantes se
dediquen a la venta de artículos y productos de las tiendas del Estado
obtenidos en el mercado negro, mientras que otros aseguran que los
cubanos se las ingeniarán para burlar de algún modo las medidas.

"Yo creo que algo se va a encontrar para burlar esto", declaró María, la
vendedora de ropa. "En este país siempre pasa eso. Como se dice siempre,
el que inventa la ley, inventa la trampa".

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