2009-04-24.
Julio Beltrán Iglesias, Agencia Libre Asociada, ALAS, Corresponsal de
Misceláneas de Cuba
(www.miscelaneasdecuba.net).- Desde que el señor Barack Obama asumiera
la presidencia de los Estados Unidos, para todos los cubanos fue algo
maravilloso, pues se le demostró una vez más al Gobierno de Cuba, que en
el Gobierno estadounidense existe democracia. Fue un puñetazo tan duro
para los que presiden Cuba, que todavía no han podido levantarse.
Todo lo que el presidente electo Obama está haciendo en beneficio del
pueblo norteamericano, era algo que debieron ejecutar los presidente
anteriores. Es un ejemplo para toda América Latina y para el resto del
mundo, ¿por qué no? Lo que realmente no entiendo bien, es la política
que está llevando o tratando de llevar hacia Cuba.
Un país que lleva gobernado por más de cincuenta años por el mismo
hombre, que llegó al poder mediante un golpe de estado asumiendo la
presidencia del mismo, sin unas elecciones democráticas, traspasándole
el poder al hermano cuando se sintió enfermo; quien es otro dictador y
farsante presidente, que no es capaz de tomar las más simples decisiones
por si mismo.
Solo falta que el convaleciente anciano hermano realice una reflexión,
para que todos corran como títeres a cumplir el deseo del invisible
decrépito dictador, que no se conforma con nada y todo lo ve mal. El
Gobierno norteamericano trata de extenderle la mano y el se la escupe
con sus absurdas reflexiones.
Me he acercado a varios jóvenes dentro de Cuba, que de hecho no son
disidente pero saben como pienso, a personas de avanzada edad, y a
disidentes tratando de ver sus puntos de vista, y el ochenta por ciento
de las personas a las cuales me he acercado desde el pasado martes, me
han comentado que no estaban de acuerdo conque el Gobierno
norteamericano levantara las restricciones sin que el Gobierno cubano se
pronunciase a favor del pueblo cubano.
Dentro de Cuba todo sigue igualito. El Gobierno sigue robándole al
pueblo el veinte por ciento de los dólares que reciben de sus familiares
de los EE.UU., y por ende le roba ese mismo porcentaje a los que visitan
Cuba como turistas.
Encarcela a los cubanos que se acerquen a los visitantes turistas, y los
acusa de asediarlos, sin tan siquiera pregúntale al asediado. Prohíbe
que el cubano a pesar de estar visado salga del país reteniéndole la
famosa tarjeta blanca. Niega los presos políticos y por supuesto a la
oposición cubana, que es sancionada en juicios sumarios a muchísimos
años de cárcel por el solo motivo de pensar distinto al Gobierno y
expresar lo que piensa.
Cuba no cambia, los gobernantes del país temen a esa palabra, solo
aceptan las dictaduras, como la de Hugo Chávez, discípulo de los
Castros, o la del farsante, hipócrita, analfabeto Evo Morales, que tiene
que plantarse en una huelga de hambre para que le sea aprobada una ley.
Todo porque con sus falsas promesas y poca inteligencia el pueblo no le
cree y es aplaudido por el convaleciente anciano Castro y divulgada por
la prensa internacional como un hecho relevante, pero en Cuba nadie se
acuerda del disidente y expreso político Jorge Luis García Pérez
(Antúnez), que lleva más de cincuenta días sin ingerir alimentos
representando un peligro para su vida, en huelga de hambre en Santa
Clara, e ignorado por la prensa.
O la del reciente joven opositor Edgar López Moreno, que le es retenida
la salida del país, estando visado hace ya dos años por los EE.UU., como
refugiado político, torturándolo y desestabilizándolo sicológicamente.
Sólo me queda exhortar a la opinión internacional para que piense un
poco más en los cubanos, en el pueblo, aunque lo vean silenciado por el
temor de caer en una de las mazmorras castristas. Todos en Cuba abogamos
por el CAMBIO. Si no fuese así, los cubanos no emigraran tanto, no
estuvieran tan desesperados por salir de Cuba, no muriesen miles en las
aguas que separan las costas de Miami con Cuba.
EN CUBA, TODO SIGUE IGUAL - Misceláneas de Cuba (28 April 2009)
http://www.miscelaneasdecuba.net/web/article.asp?artID=20423
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