Disidentes: El número de presos políticos disminuye, pero aumenta el de
'detenciones arbitrarias'
En el primer semestre de 2008 hubo al menos 640 arrestos temporales de
opositores, frente a 325 en todo 2007.
Agencias | 12/08/2008
El número de presos políticos en Cuba bajó de 234 a 219 durante el
primer semestre de 2008, pero la situación continúa siendo "muy
desfavorable" para la disidencia interna, denunció el lunes en un
informe la Comisión Cubana de Derechos Humanos y Reconciliación Nacional
(CCDHRN).
La Comisión, presidida por el disidente Elizardo Sánchez Santacruz, dijo
que no ve "señales" de cambio desde que Raúl Castro sustituyó a su
hermano Fidel, en julio de 2006, informó Reuters.
"Dos años después de ciertos reajustes en la alta cúpula gobernante, la
situación de los derechos civiles, políticos y económicos (...) continúa
siendo muy desfavorable", dijo la organización en el informe.
"El número de prisioneros por motivos políticos (...) es uno de los más
altos del mundo en cifras relativas", añadió. "El gobierno de Cuba
mantiene en su enorme sistema carcelario la mayor cantidad a escala
planetaria, en cifras absolutas, de prisioneros de conciencia adoptados
por Amnistía Internacional", afirmó la CCDHRN, según EFE.
La Comisión advirtió en su informe que hay un cambio de "matices" en la
"represión política" desde que Fidel Castro enfermó.
"Ya no se basa en largas condenas de prisión como ocurría en años
recientes (...) Lo más frecuente es que ocurran detenciones de corta
duración, amenazas, interrogatorios por parte de los aparatos
policiales", dijo.
Según el documento, en el primer semestre de 2008 hubo al menos 640
detenciones arbitrarias de disidentes, frente a 325 arrestos temporales
documentados en todo 2007.
"Si bien el número de prisioneros políticos no tiende a aumentar, es
visible que el gobierno continúa aplicando, cada vez más ampliamente, la
variante de sustituir la represión política basada en largas condenas de
cárcel por procedimientos de 'bajo perfil'", sostuvo la CCDHRN.
La Comisión denunció que los cuerpos policiales se comportan como si
fueran un "ejército de ocupación" y que la represión alcanza incluso a
ancianos, vendedores ambulantes y recolectores de restos útiles en los
contenedores de basura.
Sobre los derechos económicos, señaló que "la situación sigue siendo muy
desfavorable, debido a que continúa prevaleciendo el monopolio casi
absoluto del Estado en todos los sectores y ramas de la economía,
exceptuando ciertos islotes de propiedad privada".
La CCDHRN calificó de "positiva" la decisión adoptada por Raúl Castro en
febrero de conmutar la pena de muerte a varios condenados.
No obstante, criticó que ha prevalecido "la falta de suficiente
información pública en cuanto al número de conmutaciones y cuántas
fueron por 30 años de prisión o cadena perpetua".
La organización dijo haber calculado, por "inferencias", que "las penas
de muerte conmutadas fueron entre veinte y treinta, y alrededor de la
mitad lo fueron por cadena perpetua".
Además, consideró "muy inquietante" que, cinco meses después de dictada
la medida, "todos los presos beneficiados con la conmutación permanecen
internados en los corredores de la muerte".
La Habana suscribió en febrero dos importantes pactos de Naciones Unidas
sobre derechos civiles y políticos. En este caso, la Comisión pidió que
sean ratificados pronto y sin reservas, como "señal inequívoca de buena
voluntad política" del gobierno.
"Tenemos la preocupación de que, al firmar estos pactos, el gobierno de
Cuba pudiera estar enviando falsas señales de cambio", dijo la
organización. "No hay voluntad política verdadera (...) para que las
cosas mejoren", agregó.
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