antimisiles de EE UU
'No pasa del plano de las conversaciones, pero tampoco puedo decir que
no exista absolutamente nada real detrás de ellas', dijo un alto militar.
Agencias | 21/07/2008
Rusia podría comenzar a enviar con regularidad bombarderos de largo
alcance a Cuba, en respuesta al proyecto estadounidense de instalar un
escudo antimisiles en Europa del Este, informó el lunes el periódico
ruso Izvestia, citando a responsables de las fuerzas aéreas rusas,
reportó la AFP.
"Tales discusiones existen", dijo al periódico un alto responsable que
requirió el anonimato. "No pasa del plano de las conversaciones, pero
tampoco puedo decir que no exista absolutamente nada real detrás de
ellas", afirmó el oficial, según la agencia RIA Novosti.
La fuente citada por Izvestia no dejó claro si se trataría de basar los
aviones de forma permanente en la Isla.
Un ex alto responsable del Ministerio de Defensa ruso, Leonid Ivashov,
declaró al diario que Cuba debería más bien ser utilizada como escala;
"no como base permanente —lo que resulta innecesario— sino como
aeropuerto auxiliar, para reavituallamiento".
Los portavoces de la fuerza aérea y del Ministerio de Defensa ruso se
negaron a comentar tales declaraciones.
El envío de bombarderos de largo alcance rusos a Cuba representaría una
reactivación de la cooperación militar entre los dos ex aliados de la
Guerra Fría. Rusia cerró en 2002 su último emplazamiento militar en la
Isla, una base de radar en Lourdes.
Esta medida "sería una buena respuesta a los intentos de instalar bases
de la OTAN cerca de las fronteras de Rusia", declaró Piotr Deinekin, ex
alto responsable de las fuerzas aéreas rusas, a RIA Novosti, en reacción
a la información publicada por Izvestia.
En un discurso el año pasado, el entonces presidente Vladimir Putin
relacionó el diferendo sobre la defensa antimisiles estadounidense con
la Crisis de los Misiles de 1962 en Cuba, aunque añadió que las
relaciones entre Moscú y Washington "han cambiado mucho" desde entonces.
El descubrimiento, en 1962, de que Moscú estaba construyendo una
lanzadera de misiles nucleares en Cuba, llevó al mundo al borde de la
guerra nuclear durante semanas de tensión entre la Unión Soviética y
Estados Unidos.
La semana pasada, el presidente ruso Dimitri Medvedev advirtió que Moscú
tomaría medidas contra los planes de Estados Unidos de construir un
radar antimisiles en la República Checa y un interceptor de misiles en
Polonia.
Rusia argumenta que dichas instalaciones son una amenaza para su
seguridad nacional, aunque los estadounidenses digan que están dirigidas
contra países como Irán.
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