Se agrega la venta de electrodomésticos; quién podrá comprarlos es la
cuestión en la isla
Pilar Marrero
pilar.marrero@laopinion.com
02 de abril de 2008
Las recientes medidas anunciadas por el gobierno de Cuba, que permiten a
los cubanos acceso a los hoteles y zonas turísticas de la isla, así como
a la compra de teléfonos celulares, computadoras y otros productos
electrodomésticos, son cambios importantes, aunque no necesariamente
profundos, señalaron varios observadores.
"Es dificil saber si son cambios de maquillaje o si son cambios más
profundos. En todo caso, son pasos muy cortos que no van a tener un
impacto amplio en la población", señaló Orlando J. Pérez, profesor de
ciencias políticas de Central Michigan University.
Pérez, quien es cubanoamericano, dice que el obstáculo más grande para
que el cubano promedio pueda disfrutar de estas nuevas libertades es la
situación económica.
"Es como si te dicen que tienes derecho a comprarte un Rolls Royce, pero
no te lo puedes comprar porque no tienes dinero", dijo Pérez. "Esto,
para tener impacto, tendría que venir acompañado con un conjunto de
reformas económicas que aumenten el poder adquisitivo de los cubanos. Un
aumento de salarios, un cambio en la valoración de la moneda nacional,
etc.".
El salario promedio de un cubano es de menos de 20 dólares mensuales,
aunque se estima que más de la mitad de la población tiene acceso a
dólares por las remesas familiares que recibe. Una computadora está
listada en alrededor de 600 dólares y la sola activación de un celular,
ya no el teléfono en sí, cuesta 120 dólares.
Entretanto, en Cuba aún no hay acceso a la internet, ni siquiera de la
forma limitada o censurada que existe en China, aunque hay cubanos que
tienen y utilizan correos electrónicos "pirateados" o ilegales.
Desde que Raúl Castro, hermano de Fidel Castro, tomó la presidencia
interina hace más de un año y luego oficialmente hace un mes, se
especula que aquel pretende realizar aperturas económicas que podrían
inspirarse en un esquema como el chino: entrar al capitalismo sin perder
el control político.
"Se ha hablado de un modelo chino. Pero faltaría muchísimo para llegar a
eso. Lo que yo percibo es que hay dentro de Cuba un proceso de
cuestionamiento de qué es lo que hay que hacer a continuación", añade Pérez.
Las medidas tomadas parecen estar encaminadas en esa dirección, aunque
probablemente servirán más para calmar un poco los ánimos entre las
generaciones más jóvenes, estudiantes en Cuba, que han cuestionado
abiertamente a funcionarios del gobierno en meses recientes sobre las
múltiples prohibiciones que imponen a su ciudadanía.
"Creo que esto denota que los cubanos están preocupados por la opinión
pública y en responder, al menos hasta cierto punto, a críticas que se
han hecho públicamente", señaló Pedro Freyre, abogado cubanoamericano y
ex presidente de Facts About Cuban Exile (FACE) .
Para el periodista Jesús Hernández, editor de la revista Contacto, en
Los Ángeles, Raúl Castro está dando pasos prácticos para dar una imagen
de que está modernizando a Cuba.
"Se quita de encima el esquema soviético, que suena muy cavernícola, y
se coloca en el marco del mundo occidental", dijo Hernández. "Es decir,
el control no tiene por tu actividad política sino como en el resto del
mundo, por el simple hecho de tener o no dinero para acceder a ello".
Se habla incluso de que el gobierno retirará la famosa "tarjeta blanca",
un permiso que sirve para que los cubanos puedan salir del país, lo que
es vedado sin esta autorización expresa del gobierno, pero aún no ha
habido un anuncio oficial al respecto.
Algunos creen que el gobierno cubano se prepara para un cambio de
administración en Estados Unidos.
"En mi opinión el gobierno de Cuba está jugando a que va a ganar un
demócrata, sea Obama o Clinton. Hace unos años Obama dijo que quería
levantar el boicot, aunque luego ha cambiado. Y esto es lo que está
haciendo Cuba para prepararse", dijo Guillermo Martínez, periodista
afincado en Miami. Martínez señaló que los cambios dados en la isla "son
importantes, mientras se mantengan".
"No es la primera, sino como la tercera vez que Cuba se ha abierto y ha
creado oportunidades para el cubano en la isla. A finales de los años 60
crearon los mercados campesinos y luego los eliminaron. Después
permitieron pequeños negocios y también más tarde les pusieron un pare",
agregó Martínez.
Las agencias de prensa han venido mostrando noticias de cubanos haciendo
cola para entrar a las tiendas y de algunos haciendo compras. Freyre
considera que es irónico "que quienes se van a beneficiar más con esto
son los que tienen familiares en Estados Unidos y que reciben remesas, y
no los más leales al régimen".
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