MERCENARIOS?

¿MERCENARIOS?
2007-12-17.
Osmani Ricardo Segura García, Periodista Independiente, Centro
Informativo La Estrella Solitaria

"Sólo la opresión debe temer al ejercicio pleno de las libertades." José
Martí

LA HABANA, 17 de diciembre de 2007.- Recientemente en una de las
llamadas Mesa Redonda de la televisión cubana, que cada día es
trasmitida por televisión y radio, el régimen castrista dedicaba uno de
sus programas políticos para desprestigiar y desmoralizar a la oposición
interna en Cuba.

Y para esto, los voceros de la dictadura, que comúnmente participan de
los teques de dicha mesa, presentaban una vez más a la oposición cubana
como mercenarios al servicio de potencias extranjeras.

Ciertamente no voy a indagar si existen opositores o no que en Cuba
reciben dinero desde el exterior. Este es un tema que no me preocupa ni
me interesa, aunque quiero dejar bien claro ante aquellos que
cobardemente nos acusan de mercenarios, que como yo, existen muchos
opositores en Cuba que no reciben un solo centavo por sus
responsabilidades como luchadores por la libertad.

No obstante, si por traer libertad, democracia y bienestar a los
cubanos, se necesita reunir algún dinero para la causa, y si existen
manos y corazones generosos que quieren ayudar al respecto, bienvenido sea.

El mismo Fidel Castro sabe perfectamente bien que la ayuda económica es
importante, aunque no imprescindible, pues para el derrocamiento de la
dictadura batistiana la ayuda de los cubanos del exilio y de altos
funcionarios extranjeros, proporcionó a la causa de los luchadores en
Cuba, los materiales necesarios, incluyendo armas, para alcanzar el
triunfo esperado.

Sin embargo, ahora nos dicen mercenarios. Para el castrismo en Cuba,
luchar por la libertad de nuestra patria es sinónimo de mercenarismo, y
con ese calificativo nos muestran ante la opinión pública nacional e
internacional.

Pero la realidad es otra: los opositores en Cuba somos los cubanos de a
pie, los que sufrimos día a día el precio que se paga cuando se lucha
por la libertad, y esto equivale a cumplir largas condenas de privación
de libertad en las cárceles castristas. Ningún mercenario está dispuesto
a pagar tan alto precio, y nosotros de hecho lo estamos pagando, y muy caro.

http://www.miscelaneasdecuba.net/web/article.asp?artID=13097