Ponchera de botas de goma
LA HABANA, 18 de octubre (Fabián D. Arcos / www.cubanet.org) - Un 
campesino de San Antonio de los Baños mostró orgulloso su par de botas a 
este reportero. Más que botas, parecían una cámara llena de parches y 
ponches. "Se salvaron" -dijo jubiloso. Ahora podrá trabajar nuevamente 
calzado para buscar el sustento diario en el duro y mal pagado campo cubano.
Varias décadas llevan reclamando los campesinos cubanos al estado que 
les vendan ropa y calzado adecuados para trabajar. Un par de botas 
equivale a un cerdo de 100 libras. Y los campesinos realizan el trueque 
de buen gusto.
La típica inventiva del cubano ha llegado hasta lo impensable: una 
ponchera para reparar botas de goma. Dejando a un lado la estética, se 
hacen maravillas. No se trata de lucir bien en el campo. Desconfiado, el 
campesino no quiso revelar quién lo hacía ni cuánto cobraba. A simple 
vista los materiales y la técnica empleada sólo podían provenir de un 
establecimiento estatal.
¿Llevarán esta innovación a los foros nacionales de la ANIR? Es poco 
probable, porque al estado no les preocupa que muchísimos obreros 
agrícolas tengan que laborar casi descalzos.
No comments:
Post a Comment