Hacia la cubanizacion

Hacia la cubanización
héctor strédel

A la par que grita destempladamente su falso antiimperialismo, mientras
que por tras corrales negocia con el gobierno norteamericano
multimillonarios acuerdos petroleros y de otra naturaleza, el
golpista-presidente continúa la ejecución de su proyecto de entrega de
Venezuela a la Cuba fidelista.

No son solamente los treinta mil dizque médicos cubanos ahora
responsables del sistema nacional de salud. Treinta mil dizque médicos
que, en violación de la ley venezolana, ejercer la profesión en todo el
territorio nacional sin haber hecho la reválida previa y en
desplazamiento de los médicos venezolanos egresados de nuestras
universidades, o graduados en el exterior pero que también en su caso
están obligados a revalidar.

Treinta mil dizque médicos cubanos a los que el Estado les paga
cuatrocientos dólares mensuales, más vivienda, alimentación, vehículo y
otros gastos, mientras que a los venezolanos al servicio público se les
pagan sueldos inferiores a los doscientos dólares.

Además de esos dizque médicos cubanos, que junto con sus presuntas
labores profesionales hacen la de comisarios políticos al servicio de
Fidel Castro, también la educación y el deporte nacionales están
colonizados por el fidelismo; y en los cuarteles y en los servicios
nacionales de inteligencia mandan los "asesores" cubanos. Y en muchas
otras actividades fundamentales, directamente vinculadas con la raíz,
con la esencia y con la identidad de la nacionalidad, de nuestra
independencia territorial, política, económica, cultural y científica.

Pero no se queda allí el proceso de cubanización que tan diligentemente
dirige el golpista-presidente, en obediencia a las directrices de "su"
comandante Fidel Castro. A tanto llega la cosa, que el canciller
Rodríguez precisaba operarse una rodilla. Y, en desprecio de la
medicina, de los médicos y de los hospitales y clínicas nacionales ¡fue
a operarse a La Habana. Igual que la "heroína" -¿nueva Luisa Cáceres de
Arismendi?- del "proceso", la señora Lina Ron, también enviada a Cuba a
someterse a tratamiento médico por una infección intestinal.

Y sigue. En el escándalo del proyecto de complejo azucarero de Barinas,
que sin haber sido construido ni siquiera en una tercera parte y por lo
mismo, sin haber comenzado a operar, ya acusa estafa, o malversación de
fondos públicos -corrupción administrativa, pues- por el orden de los
tres millardos y pico de bolívares, también aparece la presencia cubana.
¡Asesores" cubanos.

Y más. Ahora se detecta que millares de muchachos venezolanos están
siendo enviados mensualmente a Cuba. Muchachos humildes, seleccionados
entre los peor calificados de las escuelas públicas de todo el país,
para "empaquetarles" hacia Cuba. Muchachos que, por su origen y su
condición, ni siquiera pudieron gozar el sueño de tal viaje al exterior.

Los obnubilan con tal señuelo. Apenas deben llevar un pantalón, una
camisa, un calzoncillo, cepillo y pasta dentales, y desodorante. Lo
demás lo tendrán en Cuba.

Millares de muchachos venezolanos. Carne gratuita para el
indoctrinamiento, para ser inoculados con el bacilo infernal del
pensamiento único y del culto a la personalidad, para ser
incondicionales y serviles lacayos del golpista-presidente y del
comandante en jefe del golpista-presidente, Fidel Castro.

Tres meses de entrenamiento, incluido el manejo de armas. Para regresar
a engrosar las legiones de esbirros y sigüíes militares y civiles del
golpista-presidente y, por supuesto, el tirano de Cuba.

Por allí vienen, también, los votos cautivos con los que el
golpista-presidente proyecta eternizarse en el poder para satisfacer el
propósito de Fidel Castro en hacer de Venezuela una simple colonia
cubana. En la que, ya consolidada, ni falta que harán los votos.

http://www.eltiempo.com.ve/noticias/default.asp?id=64803