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Saturday, January 21, 2017

Cubanos en tierra de nadie

Cubanos en tierra de nadie
DANIEL SHOER ROTH
dshoer@elnuevoherald.com

Por cuál camino? preguntan los angustiados migrantes cubanos varados en
algún rincón de las Américas que buscan paz y oportunidad lejos de su
martirizada isla. ¿El de la autodeterminación? ¿O el de la condena a la
miseria? ¿El de los sueños ambiciosos y alcanzables? ¿O el de la rigidez
de las ideas imperantes?

Hoy son hijos de nadie; no cuentan ni tienen voz. Quedaron atrapados
súbitamente en el laberinto sin salida, esa enigmática metáfora
universal de los caminantes sin papeles, de los errantes que con corazón
heroico buscan un mejor porvenir en paraísos de abundancia y bienestar.

Las horas insomnes de espera transcurren lentas y llenas de molestias.
Las imágenes de hacinamiento y el eco de los lamentos no dejan de
escucharse en el Sur de Florida. Para el exilio cubano el dolor se
entremezcla con la impotencia y la frustración de no poder hacer nada o
menos de lo que se quisiera para remediar las penurias de esos
compatriotas colgados con alambres de hierro en el puente hacia el Sueño
Americano.

La derogación de la política "pies secos, pies mojados" que permitía a
los cubanos que tocaran el suelo estadounidense permanecer aquí y
calificar para la residencia legal, deja a miles en el limbo,
dispersados en situación irregular y sin un norte hacia dónde dirigirse
o al menos mirar. Muchos están aislados y desesperanzados, expuestos a
la rapacidad de autoridades corruptas y contrabandistas siniestros.

La incertidumbre del futuro inmediato roba la fe a esta pobre gente que
salió de Cuba apostando a la promesa norteamericana si tocaban tierra
firme. Merecen un gesto noble y humanitario de ser acogidos si se
comprueba que emprendieron su sendero a la Norteamérica de leche y miel
antes del cambio implementado por la Administración saliente de Obama
como parte del proceso de "normalización" de las relaciones entre
Estados Unidos y Cuba.

Fue precisamente ese acercamiento el detonante de un éxodo
multitudinario en los últimos dos años. Propulsó agónicas y riesgosas
travesías en el seno de un pueblo agotado que teme la derogación de la
Ley de Ajuste Cubano, una reliquia de la Guerra Fría innecesaria para
afrontar los desafíos y las amenazas de hoy.

Es verdad que el exilio tradicional, protagonista de una de las
historias de mayor éxito entre los inmigrantes en Estados Unidos, se
siente ultrajado ante los abusos a esta ley de acogida preferencial
cometidos por coterráneos que profanan su espíritu legítimo, yendo y
viniendo de la isla, así como orquestando fraudes y robos millonarios
para luego huir a Cuba con fondos del erario norteamericano.

Si bien "pies secos, pies mojados" permitió a miles de cubanos escapar
la represión política del régimen comunista, emigrantes más recientes se
han valido de esta provisión para alcanzar un mejoramiento cualitativo
en términos económicos. Acabar con la excepcionalidad crea mayor equidad
con respecto a las poblaciones refugiadas en su conjunto, dando a todos
el mismo acceso a derechos si cumplen las leyes correspondientes. Sin
embargo, no se puede obviar la ausencia de libertades y de estado de
derecho en la Isla, ni el recrudecimiento de la represión contra la
población civil.

La enunciación de políticas migratorias restrictivas y reforzamiento
fronterizo por parte de la Administración entrante de Trump no surte
esperanza a estos cubanos que también deberán afrontar el prometido muro
de contención y, si llegaran a cruzarlo, sufrir las condiciones de
precariedad de una vida expuesta al desamparo de la ilegalidad.

La indignación suscitada en Miami por este crudo cierre de la puerta a
una existencia más digna –escenario que, por cierto, se repite hoy
alrededor del globo con un retintín xenófobo– nos recuerda nuestra
humanidad compartida y el compromiso de tratar al prójimo con sumo
respeto, estima y voluntad de colaboración. Estos días llaman al
sacrificio en aras del deber; a la nobleza del alma. Los migrantes
cubanos zozobrados en el camino no deben convertirse en estadísticas.
Por convicción moral, el exilio está llamado a rescatarlos de la injusticia.

Escritor venezolano, periodista, biógrafo, ensayista y cronista.

Siga a Daniel Shoer Roth en Twitter: @danielshoerroth

Source: Cubanos en tierra de nadie | El Nuevo Herald -
http://www.elnuevoherald.com/opinion-es/opin-col-blogs/daniel-shoer-roth/article127698824.html

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