En franco diálogo con el viejo Andrés

En franco diálogo con el viejo Andrés
[15-07-2014 11:34:48]
Enrique Díaz Rodríguez

(www.miscelaneasdecuba.net).- Defensor de los Derechos Humanos en Cuba muestra la pobreza en la que vive, y culpa al Régimen por desgastarlo económicamente.
Andrés Avelino Domínguez Beltrán, es un cubano que en su forma de vida, y con su activismo político, desmiente la imagen mostrada por el régimen de los Castro, en su afán por mostrar que el Gobierno de los Estados Unidos subvenciona la oposición interna.

El encuentro:

Me espera en la entrada de su hogar, una finquita ubicada en Marianao. Me convida a tomar un vaso de agua, y se disculpa por no tener café. Humilde es la palabra para describir su vivienda, construida con tablones de madera, muchos de ellos podridos, y con un techo que deja ver en algunas partes el azul del cielo, su casa es simplemente eso, un rancho con piso de tierra.

Se percata de mi asombro al ver las condiciones en que vive, y me dice que con lo único que cuenta es con sus ideales y su pobreza. Argumenta explicándome que al no poder trabajar, ni tener un retiro, se le imposibilita el dinero para arreglar el hogar, y que lo poco que consigue lo emplea su esposa en la comida.

La conversación:

La sombra de una mata de guayaba nos ampara durante el rato que charlo con él. Me cuenta que tiene que tiene 67 años, que trabajo durante 32, que por las leyes del país tenía que estar retirado laboralmente a los 60, y a pesar de eso, la dictadura lo privó de ese beneficio.

Me narra cómo hace unos años consintió en trabajar unas tierras al gobierno en calidad de usufructo, para de esa forma garantizar algo para la vejes. "Todo marchaba bien, pero se enteraron que yo era, como dicen ellos, contrarrevolucionario y me quitaron la finca". Refiere que la seguridad del estado (DSE), la misma que lo reprime constantemente, se ha encargado de cerrarle las puertas, para asfixiarlo económicamente.

Al interrogarle del porqué, y desde cuando pertenece a las filas de la oposición en contra del gobierno cubano, me corrige diciéndome "gobierno no, régimen y dictadura, pero gobierno no". Responde que simplemente el lucha por lo que cree justo, que pertenece al Frente de Acción Cívica Orlando Zapata Tamayo, que es pacífico, y que reclama libertad para Cuba.

Le pregunto si alguna vez ha recibido dinero por lo que hace, y si se considera un mercenario (su semblante cambia por completo).

"Mira como yo vivo, Fidel puso en una noche 100 bombas derramando la sangre de inocentes, fue preso político, armó y llevó a cabo una expedición costeada con dinero ajeno, pagó y entrenó guerrillas en toda Latinoamérica, mantiene a Cuba en total opresión, vive como un rey a costa del sudor del pueblo, ¡dime tú quién es el mercenario!’’

Agrega que muchos hermanos del exilio contribuyen económicamente con la causa, que él no recibe ayuda ninguna, pero que para nada considera indecoroso aceptar el apoyo de patriotas que bajo las narices de los Castro y conscientes de nuestras necesidades apoyan la causa por la libertad.

En forma retrospectiva cuenta que se integró a la lucha pacífica demasiado tarde, que con anterioridad contribuyó con esfuerzo a la mal llamada revolución, pero despertó al final del engaño.

El cielo se nubla y se impone una partida anticipada. Me despido del viejo Andrés, que en silencio tal vez piense en su retiro, en la posibilidad de un trabajo, en la dictadura y en el cambio.

Source: En franco diálogo con el viejo Andrés - Misceláneas de Cuba - http://www.miscelaneasdecuba.net/web/Article/Index/53c4f5b83a682e0bdcc77dda#.U8ZZwfmSwx4