La Plaza de Armas o la vidriera de La Habana?

¿La Plaza de Armas o la vidriera de La Habana?
[11-04-2013]
José Antonio Sánchez Santoyo
Periodista Independiente

(www.miscelaneasdecuba.net).- La Habana, Cuba. En el casco histórico de
la ciudad de la Habana, existen hace muchos años un sin número de
hombres y mujeres que se dedican a vender libros políticos y presentarle
al turista una falsa imagen de la realidad cubana, dichos señores sin
ningún tipo de conocimiento de lo que venden forman parte de ese
ejercito anónimo de lacayos del sistema, promotores por decirlo de
alguna forma, de movimiento insurreccionales en América y África.

Ya que los libros que venden en su total mayoría reflejan ese sentir, y
digo que son promotores de esas guerrillas porque son tan incautos y
estúpidos al mismo tiempo que no se dan cuenta que el régimen los
utilizan para vender revoluciones.

Cuando me refiero a la vidriera, lo hago pensando en esos pobres que
vienen aquí en su totalidad obreros, que le muestran una imagen de una
ciudad y un bienestar que no existe, el entorno de la plaza está rodeado
de cafeterías bellamente adornadas, restaurantes, hoteles, y guías que
los indican por aquí, y por allá, sin mostrarles la verdadera imagen de
una ciudad completamente destruida, con un andamiaje completamente
falso, donde los principales valores del hombre se ha encargado el
régimen de borrarlo, una ciudad como La Habana que fue la joya de
América antes del triunfo comunista, se ha convertido en una ciudad de
mendigos, parásitos y prostitutas, y si esto no fuera lo suficientemente
convincente, los barrios aledaños están en la misma circunstancia.

En cada esquina hay un timbiriche o una carretilla, donde se ofertan
productos de dudosa procedencia, donde la higiene es escasa, y lo que
ofertan tiene la más baja calidad que pueda concebirse, ese lado de La
Habana, lleno de calles rotas, de aguas albañales y basura acumulada. No
es la que le presentan a los turitas en el casco histórico de la Habana
Vieja, y cuando los llevan al Castillo del Morro o la Cabaña no le dicen
que en esos sitios guardaron prisión miles y miles de hombres, que se
opusieron a este régimen, tampoco le dicen que detrás de esos muros, se
fusilaron a millares de cubanos por sus ideas políticas, eso se guarda
en el más riguroso secreto.

Si a esta ciudad se caminara con los ojos bien abiertos, pudieran verse
ancianos mendingando, mujeres con niños pidiendo para una bolsa de
leche, edificios apuntalados, aceras partidas, aguas albañales corriendo
por el pavimento, en pleno corazón de la urbe.

Como eterno caminante de esta ciudad y como un incansable luchador,
donde a diario se acrecienta mi deseo de luchar por los derechos civiles
nunca perderé la esperanza de ver un día borrada del entorno de la plaza
en Habana Vieja esas oscuras vidrieras que tratan de impedir la luz de
la verdad de toda alma noble que visita a mi amada isla de Cuba, creo
fervientemente en la libertad, la democracia y en una ciudadanía con
patriotismo donde no haya sitio, para esos libreros y donde el sentir y
la verdad sean los pilares que nos identifiquen.

LA PALABRA DEBE ESTAR AL SERVICIO DE LA VERDAD.

http://www.miscelaneasdecuba.net/web/article.asp?artID=39016