DETRÁS DE LOS IMPOSTORES

DETRÁS DE LOS IMPOSTORES
2007-08-07.
Eduardo Menéndez, Periodista Independiente

La televisión cubana presenta los domingos en la noche a las 9 y 30 PM
un policíaco basado en "hechos reales". No interesa aquí la dramaturgia
zigzagueante con personajes planos, que pone en aprieto a sus actores
(bailarines sin música) imposibilitados de encontrar matices humanos que
le permitan una interpretación orgánica.

De la pieza, como género dramático, no pueden escapar los episodios,
pero libretistas astutos le dejan siempre una rendija a sus
contradicciones. Lo que sí interesa aquí es que el domingo 5 de junio
presentaron "Los impostores".

En esta ocasión tres individuos, atribuyéndose jerarquías y títulos
eclesiásticos, le ofrecían a "gente buena" contratos en el extranjero
–como obra de caridad- a cambio de unos cuantos miles de dólares o pesos
convertibles, todo ello con la obligada aclaración de que su motivación
principal no era por dinero.

La policía al tener conocimiento de la existencia de estafadores con
semejante modo de operar, comienza todo un despliegue de investigadores
que incluye a informantes "voluntariamente revolucionarios" al servicio
de distintos oficiales.

El oficial superior jefe de la operación enfatiza sobreactuadamente que
la Iglesia Católica no tiene responsabilidad en este asunto. Parece que
actualmente se están cuidando mucho esas relaciones o al menos se le
quiere decir a "alguien" que esas relaciones se cuidan (aquellos que se
lo quieran creer).

Lo cierto es que, ficción o realidad, en la televisión cubana, la prensa
escrita, radial o cualquiera de los otros medios de comunicación, nunca
se sumergen en las reales causas de los problemas socio-políticos en el
amplio espectro (¿fantasmas?) creado por obra y gracia de un sistema
totalitario que arrincona y no deja margen a la iniciativa individual
para el desarrollo de la vida dentro de las leyes y la honestidad.

En todas las sociedades, sean cuales sean su modelo, se producen hechos
delictivos de los cuales es culpable el sistema. Pero en Cuba, la
pirámide clásica de la información sigue coja aún en su silla de ruedas:
El por que real de las conductas y sucesos que violentan la vida
ciudadana. En Cuba, todas las cusas están en las ramas, nunca en el
tronco, y mucho menos, sus raíces.

-¡Basta ya carajo!- dijo un campesino en una Terminal de ómnibus en una
provincia. Yo lo hago mío.

¿Por que a gente se quiere ir de Cuba? ¿Que da lugar a la existencia del
delincuente? ¿Quiénes se quieren ir….quiénes se irían sin querer?

Me atrevo a demostrar que son miles de miles los que quieren irse y
miles de miles los que nos iríamos sin quererlo. ¿Por qué nos iríamos?
¿Porque somos bobos que nos chupamos el dedo y queremos abandonar el
"Paraíso"? ¿Por la ley "asesina" de ajuste cubano?

-Sí, ¡Basta ya guajiro! Es criminal que te devuelvan de los Estados
Unidos porque se te mojaron los piecesitos, como es criminal que te
tenga preso en tu "querida islita".

¿Por qué se produjo Camarioca, cuántos se largaron por el Mariel y qué
ocurrió en Cojimar después de los disturbios de agosto del 94?

-Comandante, ahora que usted está recuperadito, le recuerdo que Ud.
mismo dijo en una ocasión que había que "atacar las causas del delito".
Si no las combaten, por lo menos deje que se denuncien. Saque su
cabecita en la televisión y diga: "Que se vayan todos los que quieran irse."

Oficina de Intereses de los Estados Unidos, Uds. que solo apoyan la
inmigración "ordenada y segura", ofrezcan solicitud de visas por el
orden de una cola frente a la embajada.

Países amigos del pueblo cubano, organizaciones humanitarias y de
derechos humanos, hagan otro tanto.

Nadie tendrá que esperar la muerte de Castro. El hará como "Chacumbele"
que el "mismito se mató"

Vamos detrás de los impostores. ¿Quiénes son? ¿Cuántos? ¿Dónde están?
Realmente, ¿alguien quiere un cambio para el pueblo de Cuba?

http://www.miscelaneasdecuba.net/web/article.asp?artID=11071